La Diputación de Ciudad Real ha incrementado hasta 40.000 euros la cuantía económica que se aplica a la convocatoria que se publicará en el presente ejercicio, por segunda vez en la historia de la institución provincial, con el objetivo de hacer más factible entre los colectivos de personas con capacidades diferentes y de movilidad reducida el uso del transporte público en el ámbito rural. La institución que preside José Manuel Caballero ha consignado 10.000 euros más en 2018 con la finalidad de que aumente el número de taxistas, el año pasado se acogieron un total de cinco, y se logre así incrementar en nuestro territorio la oferta de vehículos que pueden trasladar con garantías y comodidad a quienes presentan limitaciones motoras desde cualquier punto de la provincia a la capital con finalidades de corte sanitario, administrativo, de consumo o de ocio.
El presidente de la Diputación se reunió con la Asociación Provincial de Taxistas, en representación de la cual han acudido Manuel García, presidente, Juan José Sansebrín y María José Calero, ambos miembros de la junta directiva de la citada entidad. Según nos confirma Sansebrín, en declaraciones exclusivas para Diario 16, se encuentran muy agradecidos a la Diputación por la sensibilidad mostrada “al sector del taxi” y ayudar subvencionando “una parte importante del gasto de la adaptación de los vehículos, que hasta ahora recae sobre las espaldas del profesional”. Así también ha destacado el taxista que el sector carece de otras ayudas a nivel institucional “para estos vehículos que tan necesarios son para los ciudadanos que tienen una discapacidad o movilidad reducida, haciendo así el desplazamiento y la vida más fácil para estas personas”.
Caballero, por su parte, les ha expresado su claro compromiso con el taxi rural porque el Equipo de Gobierno que preside sabe que es el medio de transporte que utilizan muchos vecinos, incluso los que viven en poblaciones alejadas de la capital, para satisfacer necesidades de diferente naturaleza que implican un desplazamiento. De ahí que hayan apostado un año más por apoyar a los taxistas que están dispuestos a adaptar su vehículo para que pueda ser utilizado por usuarios que tienen muchas limitaciones y, por tanto, han de viajar en condiciones especiales.
El presidente de la Diputación, de manera esperanzada, ha afirmado que quieren conseguir que Ciudad Real sea la provincia española que más taxis adaptados tenga en servicio. Sobre todo porque se trata de una demarcación muy extensa, con 20.000 kilómetros cuadrados, tan amplia que hay 200 kilómetros de punta a punta. Esta realidad rural, como nos cuenta Sansebrín, provoca que pueblos que “pueden tener alguna línea regular de autobuses, es limitada en horario y efectivos y es ahí donde el Taxi, que es otro transporte público de viajeros, sí hace esa labor de puerta a puerta facilitando así el desplazamiento de esas personas”.