Ya tenían preparadas las portadas tipo «La gloria llega al Mundial de Clubes» o «El rey quiere su copa»…, bueno, ya saben, las cosas del nacionalmadridismo. Pero no. Habían vendido que la llegada de Xabi Alonso suponía una nueva era. Los «fichajazos» iban a servir para tapar todas las carencias, además les han salido casi gratis —luego uno se entera que AA son 12 millones, Hujsen trae bonus y Mastatuono son 60 y tantos del ala— y cobrarán en gloria. Resulta que la nueva era es casi como la anterior, ni robando ganan.
Sí, porque el árbitro sabía perfectamente lo que tenía que hacer. En la primera jugada dudosa dentro del área del Al Ahilal había que pitar penalti, mucho más si el equipo no iba ganando. Y si no, extender el tiempo de añadido hasta que marcase el equipo de su maldad imperial. Valverde, que es un tronco sobrevalorado de mucho cuidado, falló el penalti —aunque no le acosarán como a Morata y le perdonarán, como los puñetazos que da de vez en cuando—. Vinicius, que había cambiado el chip e iba a echarse el equipo a la espalda, se comió un mojón enorme. Y eso que habían salido al campo sin Mgaffé, pero debe ser que la mufa llega más allá.
Cerrojazo indecente, llegando a defender con cinco atrás y cuatro en el medio, frente a un equipo interesante, lleno de viejas glorias europeas —aunque sin su mejor delantero— pero que tampoco es gran cosa en comparación. Si hasta Renan Lodi ha parecido Everaldo cómo habrá sido la cosa en defensa. Y en ataque esperando que el árbitro hiciese de las suyas. Aunque ni por esas. Ahora dirán, de hecho ya lo dicen, que el Al Hilal sería casi puntero en la liga española, que si el calor afecta —en el PSG-Atleti no afectaba—, que si la abuela fuma y deja apestando la casa. De momento 140 millones gastados para seguir como la temporada anterior, siendo el mejor del equipo el delantero canterano que metió su gol de churro.
Su maldad de Pío XII —¿estará en los audios de Koldo?— debe estar muy contento. En el palco, o lo que sea que hubiese en el estadio, se le notaba la felicidad. No sería extraño que haya hecho tres o cuatro llamadas para que se critique el Mundial pese a que él mismo haya dicho que era maravilloso poco antes. Esas declaraciones desaparecerán, no lo duden. El patillas va a tener trabajo estos días para inventar cualquier cosa que tape el desastre futbolístico. Los teleñecos de la noche lo mismo. Deseando que el Atleti pierda para no quedar por detrás en ser el primer equipo español que gana un partido en el Mundial de Clubes. Todos son desde ya del Seattle Sounders y eso que hasta el momento la prensa no se había enterado de que había dos equipos españoles jugando.