“Toca ahora conciliar el sentir expresado por la militancia del PSOE en el congreso y que, de ahí, seamos capaces de sacar un PSOE fuerte, útil a la sociedad española y liderado por Pedro Sánchez” así se ha expresado José Luis Sánchez Teruel, secretario general del PSOE de Almería, en su valoración de las primarias celebradas en el partido socialista. Entiende el máximo dirigente que es tiempo de unión y de trabajo en favor de los españoles. Sólo desea que la candidatura ganadora sepa dirigir al partido y que obtenga el éxito porque “su éxito será el del PSOE”.
Por su parte el histórico dirigente guerrista de la provincia, José Antonio Amate, se ha felicitado por la victoria de Pedro Sánchez a quien él mismo apoyó. Ha calificado el triunfo como la victoria de la militancia y la revolución democrática de las bases. Pero en vez de apoyar una confrontación entiende Amate que debe lograrse la unión y volver a ser la “gran familia socialista” que fue el PSOE. De esta forma, cree el guerrista, que muchos de los que se fueron volverán. También se ha demostrado, según sus palabras que el PSOE se “ha abierto en canal” al mostrar un verdadero proceso democrático totalmente transparente. Desea que los derrotados reconozcan al ganador y que éste mismo tenga la suficiente manga ancha para recoger a todas las sensibilidades.
Sánchez Teruel, como en cierto modo hace Amate, pide que el 39° Congreso del PSOE sea un congreso de diálogo, no de imposición. Todo ello para lograr que salga un “partido fuerte, que viva con intensidad y pasión la vida política y, sobre todo, que esté a la altura para aportar soluciones a los problemas que tienen los españoles”. Cabe recordar que en la provincia almeriense ganó con suficiencia Susana Díaz a las otras dos opciones. En la capital, eso sí, venció Sánchez por poco más de setenta votos.
En la provincia almeriense, según los datos internos de ambas candidaturas, y como ha sucedido en gran parte del territorio español, la presidenta de la Junta de Andalucía había obtenido más avales que votos. Pero al contrario que en el resto de España, en su región sí ha contado con el apoyo de sus militantes. Amate ha destacado este aspecto pero, igualmente, cree en el sentido de partido y en no derribar todo para construir no se sabe qué.