Juanma del Olmo, no confundir con el mítico guitarrista de Los Elegantes, ha denunciado que con la externalización de algunos servicios en Interior y Justicia se podría estar abriendo un problema de Seguridad Nacional. En parte, ese es el motivo por el cual Podemos presentó una Proposición No de Ley (PNL) que no ha superado el trámite de la Comisión.
Esta iniciativa Unidos Podemos instaba al Gobierno a revertir la externalización de los servicios de traducción e interpretación del Ministerio de Interior. La misma ha sido rechazada por los votos de PP, Ciudadanos (evidentemente) y el PDeCAT, que para algunas cosas se alía con el PP.
Dos son las principales razones que aduce el diputado podemita. Una, la propia Seguridad Nacional porque se ha detectado que algunos traductores han filtrado la información que traducen a mafias y agencias de inteligencia extranjeras. Esto es un hecho muy grave del que el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido no ha dado explicaciones de ningún tipo.
En la Policía Nacional existen expertos, policías que han aprendido idiomas para realizar estas labores. Sin embargo, se encuentran saturados en muchas ocasiones por lo que, en vez de acudir a nuevas formaciones o contratos directo con el ministerio, se acude a la externalización, mantra liberal, de unos servicios fundamentales para la seguridad del Estado.
Una segunda razón que aducen desde Unidos Podemos es de carácter económico. Según un informe del Tribunal de Cuentas, la externalización supone aumentar en un 30% más el coste de este tipo de servicios, en comparación a si lo llevasen a cabo funcionarios o trabajadores laborales. Además, según cuentan en la formación morada, es un texto para el que han contado con sindicatos y asociaciones profesionales.
En este asunto hay una enorme responsabilidad, está en juego la seguridad de millones de personas, y también, como advierte el Sindicato Unificado de Policía, está en juego la seguridad de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en el desempeño de su trabajo», ha explicado Del Olmo durante la defensa de la iniciativa. No entiende el diputado cómo en un Estado de derecho, como se llenan la boca de decir conservadores y PP naranja, se juega con la vida de las personas de esta forma por una simple externalización de servicios.
Una externalización que contraviene, incluso, los principios liberales clásicos. La seguridad debía ser totalmente estatal para evitar situaciones que provocasen un peligro para el Leviatán (Estado). La seguridad de la ciudadanía, máxima del Estado mínimo liberal, se pone en cuestión con este tipo de actuaciones fomentadas por PP y Ciudadanos. Y el PDeCAT que no deja de ser conservador igualmente.