Tras tres años en prisión, el dirigente conservador Leopoldo López ha obtenido del gobierno de Nicolás Maduro la concesión de “casa por cárcel”, lo que en España es conocido como arresto domiciliario. Se reencuentra de esta manera el opositor al madurismo con su esposa e hijos tras una larga estancia en prisión. Hay que recordar que López estaba en prisión por los delitos de instigación política, agavillamiento, daños a la propiedad e incendios que cometió durante la marcha estudiantil de febrero de 2014.
Durante estos años López ha sido un símbolo para toda la oposición a Maduro de la lucha contra un gobierno desnortado y autoritario. Junto a Henrique Capriles, éste desde la socialdemocracia, han sido los referentes de la lucha contra un modo de gobernar que ha llevado al enfrentamiento antagónico de la población venezolana. Una población que se enfrenta a la mayor crisis política, social y humanitaria de toda su historia.
Javier Cremades, abogado español de López, ha indicado que la liberación del político venezolano supone “un reconocimiento al liderazgo de Leopoldo López, que se prepara para liderar de nuevo la alternativa al régimen de Nicolás Maduro, cuya resistencia Leopoldo ha logrado quebrar”.
Algunas fuentes hablan de la intercesión del ex-presidente español José Luis Rodríguez Zapatero en la concesión de la “casa por cárcel”, pero queda que el socialista confirme de propia voz si ha jugado un papel en tal cambio de situación penitenciaria del opositor.