La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) está llevando a cabo registros en la sede de la Real Federación Española de Fútbol. La operación está siendo supervisada por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz. Se han realizado varias detenciones entre las que se cuentan las del propio presidente Ángel María Villar y su hijo Gorka Villar.
La operación se centra en las presuntas irregularidades económicas que han podido suponer un gran prejuicio a la propia RFEF y un beneficio para Villar. También se están investigando los privilegios o tratos de favor dados por el presidente a dirigentes territoriales para garantizarse su continuidad en el cargo usando, para ello, dinero de la Federación.
La trayectoria de Ángel María Villar en la Federación ha estado envuelta en la polémica y en las constantes sospechas de presunta corrupción, sobre todo en los últimos años, con imputaciones por prevaricación, apropiación indebida y malversación.