Es una auténtica vergüenza como algunos energúmenos que no ciudadanos tratan nuestros enseres, mobiliario urbano, jardines y demás bienes urbanos, y me parece que ya va siendo hora de tomar medidas importantes contra estos vándalos, tengan la apariencia que tengan y el apellido que sea, sean vecinos de aquí o de allá, me da igual.
Gastamos miles de euros en limpieza anual de grafitis, chicles, colillas, cacas y orines de mascotas, sustitución de papeleras rotas, recogida de basura, etc.
Veo bien que haya vecinos y grupos políticos que se quejan del estado general de la pasarela y su entorno como ha hecho el PSOE esta semana, IU en su momento y como también hemos hecho en otras ocasiones desde CCD LORCA. Pero este problema es más importante de lo que pensamos y no solo es responsabilidad de los regidores que por su parte ya han publicado una noticia donde van a dedicar un presupuesto de 2,6 M€ para regenerar toda la zona de Santa Clara, incluida la pasarela y el paseo en honor del ex alcalde fallecido Miguel Navarro Molina, que mucha falta tiene porque da miedo pasar andando por allí.
Tenemos en Lorca una pasarela monumental que debemos de dar el valor que merece como uno de los monumentos más importantes y que pueden ser admirados por miles de visitantes si se les da el uso e importancia que se merece. Muchas ciudades quisieran tenerla en su inventario de bienes, pero está en Lorca y debemos aprovecharlo.
Por lo tanto, si ya hay presupuesto y voluntad de rehabilitar la zona por completo, solo es cuestión de tiempo de que esto ocurra y por supuesto que una vez arreglado no vuelva a dejarse de la mano de Dios, el cuidado y mantenimiento de esta zona emblemática, pero mientras no se realicen las obras ¿qué hacemos los vecinos y responsables? seguir permitiendo que haya “Gentuza” que cada día se dedica a llenar de mierda el entorno, de romper papeleras, tirar cristales, destrozar mobiliario, robarnos y también de gandulear y pedir dinero a los que por allí cruzan al igual que otros lo hacen en las pocas zonas de parking que tenemos. Otros van borrachos a cualquier hora del día y hasta altas horas de la noche molestando a vecinos y ensuciando todo lo que encuentran a su paso, etc, etc.
Tenemos un grave problema de civismo y de educación básica que yo entiendo solamente se puede corregir desde pequeños en las casas y escuelas, y una vez siendo adultos con mucha más vigilancia y sanciones oportunas, e incluso en casos más graves con más “mano dura”, pues hace décadas las Fuerzas de Seguridad imponían mucho más respeto, y ahora, los delincuentes se les ríen en la cara por no decir otra cosa.
Propongo primero, que desde los colegios se realicen campañas de concienciación e incluso de limpieza de pequeñas zonas delimitadas por el entorno de sus colegios, para que de forma práctica los niños de todas las razas y religiones, aprendan que es de guarros tirar basura a las calles, escupir, tirar chicles y colillas, dejar excrementos de mascotas, realizar grafitis que afean las paredes, romper el mobiliario que es de todos, etc.
En segundo lugar vuelvo a proponer que se deberían instalar cámaras de seguridad en lugares públicos como éstas zonas tan dañadas por actos vandálicos, en jardines y parques, aparcamientos públicos, etc. y que se destinen efectivos de la Policía Local de paisano para ir vigilando las calles y zonas más conflictivas de toda la ciudad. De esta manera podrán pillar in fraganti a los causantes de los daños que a todos nos molestan y pegarles un multazo que les duela el bolsillo.
Esta patrulla debe tener un móvil público donde los vecinos, de forma anónima puedan enviar fotos y videos de los guarros y delincuentes, así como su ubicación para que de forma inmediata se les pueda sorprender cometiendo los hechos o intentar identificarlos para enviarles la multa a su casa. ¿Qué ocurre si son insolventes? pues que paguen con servicios de limpieza a la comunidad o se les descuente de las ayudas sociales de las que puedan disfrutar, porque encima estamos pagando “la estancia a pensión completa” a algunos insociables que solamente nos ocasionan daños y gastos y claramente no merecen este gesto social que sale del esfuerzo fiscal de todos los lorquinos y si su estancia es ilegal y cometen actos dolosos contra todos, tampoco merecen residir entre nosotros, por lo que les deberían poner en la frontera de la forma legal más urgente.
Además, propongo que cada día, en todos los medios de comunicación locales se publiquen las sanciones impuestas, el motivo, las iniciales del denunciado, edad, nacionalidad y otros datos de interés que puedan publicarse sin vulnerar la Ley de Protección de Datos, para que de esta forma toda la población se dé cuenta de que esto va en serio y se cuiden más de cometer estos actos incivilizados. Por supuesto, si los causantes son menores, llevarlos a Comisaria y localizar a sus padres para imponer las medidas oportunas para que se aseguren de garantizar que sus nenes no vuelven a hacerlo, previo pago de los daños ocasionados, o bien realizando servicios a la comunidad que cubran los daños si fueran insolventes.
Todos los que tenemos hijos y entendemos que los críos necesitan jugar y muchos más sitios para su recreo y esparcimiento, por lo que debemos reclamar a las autoridades que las pongan en marcha, pero también debemos ser responsables de su educación y de sus acciones, para que cumplan las normas básicas de civismo siendo niños y luego de mayores que son las que más molestan a todos.
Lorca es muy grande y no podemos dejar toda la responsabilidad a los que gobiernan. Es tarea de todos vigilar el buen estado y denunciar de inmediato los actos vandálicos en tono proactivo y no de crítica negativa que suele ser la que utilizan la políticos con interés de sillón. Pensemos que la parte de ciudad donde vivimos es una extensión de nuestra comunidad de vecinos porque si entre todos ponemos un poco de interés por cuidar la finca que es nuestra, seguro que a medio plazo se notarán los efectos. No nos debe asustar el pedir que la gente respete nuestros bienes, calles y monumentos y si así ocurre, pues una llamada a la Policía y que actúen, que para eso están.