De nuevo el recurso a la innovación para modificar el Plan General de Ordenación Urbana en el Ayuntamiento de Roquetas de Mar. Y de nuevo en el entorno de Las Salinas donde la familia del alcalde tienen grandes intereses empresariales y terrenales. Familiares del alcalde Gabriel Amat, quien presuntamente controla también sociedades mediante testaferros según los informes policiales del caso Amat, poseen cerca de 700.000 metros cuadrados en la zona y, además, se encuentran vinculados empresarialmente a las empresas constructoras de la zona. De todo ello se ha hablado en estas páginas con profusión. A ello hay que sumar las expropiaciones que realizó el consistorio y que curiosamente pertenecían a dos hijas del propio alcalde.
Con estos antecedentes y pese a estar siendo investigado judicialmente, Gabriel Amat utiliza la innovación para dividir el sector en cuatro grupos de ejecución. Todo ello en el sector ZSAL-01 y previsto para más de 7.000 viviendas lo que provocaría, a decir de la oposición, un hacinamiento en la zona. Desde el PSOE, sin hacer referencias a los pelotazos personales o la investigación judicial en curso, Manuel García afirma que “El modelo que propugna el PSOE es hacer de ese entorno el paradigma de ciudad del siglo XXI en el que la convergencia de naturaleza, sostenibilidad, urbanismo, modernidad y prosperidad económica no solo no sean incompatibles sino que sean los pilares en los que se sustente el futuro de esta nueva ciudad”.
El Partido Socialista considera que no tiene sentido impulsar una gran urbanización con miles de viviendas cuando todavía hay 4.000 viviendas vacías en el municipio. Por ello, ha vuelto a insistir en la necesidad de políticas “serenas, prudentes y lógicas” para cambiar el modelo de ciudad con “una correcta planificación urbanística que prime de una vez la calidad de vida de sus habitantes y no los intereses de los promotores urbanísticos, además de apostar por la mejora de nuestros sectores productivos tradicionales, la agricultura y el turismo, y por buscar otros basados en las nuevas tecnologías o la industria auxiliar, en lugar de seguir centrándose en más ladrillo y hormigón, que nadie duda ya que es pan para hoy y hambre para mañana”.
También entienden desde el socialismo roquetero que estas actuaciones tan sólo pueden deberse al “favor que el alcalde le debe a los propietarios de los terrenos afectados por la innovación, que podrán regularizar los balances contables de sus empresas con nuevos activos que hasta ahora carecían de valor en el mercado inmobiliario”.
Un nuevo capítulo en Las Salinas, un magnifico entorno natural que está siendo destrozado desde el Ayuntamiento dirigido por Amat en favor de los intereses urbanísticos de cuatro “amigos” y presuntamente, según dicen los informes policiales, de familiares directos del propio alcalde.