Las nuevas conexiones intercuencas, mantener los regadíos existentes, aumentar el nivel de desalación y establecer una tarifa única para esta última, son los ejes fundamentales incluidos en el borrador del Pacto del Agua de la Región de Murcia que propone el Gobierno regional y que ha remitido a todas las formaciones políticas para recabar su apoyo. El trabajado elaborado por la Consejería de Agricultura y Agua de Murcia es fruto de un intenso trabajo, que también urge la firma de un Pacto Nacional del Agua que recoja soluciones definitivas para todas las cuencas. Propone que se estudie la creación de un banco o fondo nacional único del agua, que no esté organizado por demarcaciones hidrográficas
Agricultura considera que «no existen dudas sobre la existencia de un grave déficit hídrico de carácter estructural» en la cuenca del Segura puesto de manifiesto desde hace décadas y reconocido en la planificación hidrológica vigente. Plantea 23 puntos y un anexo con las sugerencias aportadas por el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats). Propone que estas sean ratificadas por partidos políticos, entre ellas la necesidad de aportaciones externas del orden de 500 hectómetros cúbicos anuales, y la regulación de los contratos de cesiones de derechos.
Como punto de partida, el trabajo realizado por la Consejería de Agricultura y Agua indica que «la utilización de todos los recursos hídricos convencionales y no convencionales, tanto propios como trasvasados, ha alcanzado ya sus límites posibles, y no solo admiten ampliación, sino que además tendrá que ser eliminada la actual sobreexplotación de acuíferos. Todo ello configura un déficit estructural ya identificado desde hace años en distintos documentos de planificación hidrológica, y que hoy día no ha sido aún resuelto».
Los puntos principales del documento son:
-En general, el abastecimiento urbano y los suministros industriales de la Región normalmente están bien atendidos mediante la red de la Mancomunidad de Canales del Taibilla, quedando únicamente un área no cubierta por esta red, el Altiplano, hoy abastecida con recursos de origen subterráneo procedentes de acuíferos sobreexplotados.
-El regadío y su actividad agroalimentaria asociada es una actividad de importancia estratégica para la Región de Murcia desde un punto de vista socioeconómico. Con una fuerte vocación exportadora y una importante base tecnológica, se trata de un sector que, sufre vaivenes de mercado y que debidamente estructurado y regulado, debe claramente mantenerse y mejorarse en el futuro.
– En los últimos años se han realizado importantes esfuerzos de modernización por lo que el margen de ahorro es hoy muy reducido y la eficiencia global del sistema muy elevado.
-No se prevén aumentos de las superficies de riego en el futuro ni mayores ahorros por mejoras de eficiencia, salvo la incorporación de las últimas tecnologías para la optimización del recurso en la toma de decisiones en un regadío localizado deficitario.
-A diferencia de los abastecimientos, relativamente garantizados, los riegos están en una situación grave de creciente precariedad por la limitación y escasez de sus fuentes de suministro.
– Los recursos trasvasables desde la cabecera del Tajo han experimentado asimismo una importante reducción, que hace que las zonas del ATS, ya transformadas y en producción, hayan visto disminuida su disponibilidad hasta situaciones inusuales.
-La escasez actual experimentada por las zonas regables del trasvase y de la cuenca del Segura ha de ser considerada como estructural y no asociada a la variabilidad climática ordinaria.
-Los recursos no convencionales como la reutilización han sido ya muy desarrollados, de forma que las posibles mejoras de disponibilidades hídricas son marginales.
-El único recurso propio susceptible de ampliación es el de las aguas marinas desaladas, bien mediante la ampliación de las plantas existentes o mediante la instalación de nuevas plantas, si bien este recurso plantea hoy problemas ambientales y costes económicos que impiden su expansión ilimitada y acotan sus posibilidades de desarrollo futuro hasta valores compatibles con la sostenibilidad económica y ambiental del sistema conjunto, para lo cual se hace estrictamente necesaria la transferencia del recuso desde otras cuencas a la del Segura, haciendo hincapié en la necesidad de un sistema integrado en todo el territorio español que equilibre la España húmeda con la seca, a través o mediante nuevos trasvases.
-Hay una sobreexplotación generalizada de acuíferos, incompatible con la normativa española y comunitaria, que, en ocasiones, degrada la calidad del agua bombeada pudiendo generar importantes externalidades ambientales, como la degradación de suelos o el problema recientemente suscitado en el Mar Menor.
-Desde el punto de vista normativo e institucional se considera que el marco actual es amplio pudiendo centrarse modificaciones en algunos aspectos concretos. Entre ellos, para la Región de Murcia resulta de gran importancia lo relativo a mecanismos de cesión de derechos, bien mediante contratos de cesión o bien mediante centros de intercambio o bancos públicos de agua. Es necesario clarificar plenamente el marco normativo de estas figuras y estudiar su extensión a conceptos hoy inexistentes como la del banco o fondo nacional único, no organizado por demarcaciones como los actuales, y los nuevos mecanismos financieros y tarifarios que pudieran desarrollarse.