Desde las propias asociaciones de la Guardia Civil han mostrado su sorpresa al haber sido convocados en la sede el PSOE en la calle Ferraz de Madrid, cuando lo habitual es reunirse en Parlamento o Senado. Sospechaban que podía ser una simple estrategia mediática, pero Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, como responsable de Relaciones Institucionales, les tenía preparada una batería de propuestas que piensan llevar al Parlamento.
Junto a Isaura Leal, secretaria de Función Pública, el dirigente andaluz se ha reunido con los representantes de las seis principales asociaciones de la Benemérita. No sólo querían conocer los avances de sus reivindicaciones históricas, sino también transmitirles y conocer su opinión sobre las dos proposiciones de ley que van a presentar en el Congreso de los Diputados y Diputadas, más la adenda de la Proposición No de Ley (PNL) de equiparación salarial entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con las Policías Autonómicas y Policías Locales que también presentarán. No la PNL de equiparación con los Mossos D’Esquadra como afirman algunos medios de comunicación malintencionadamente.
Frente a la desidia que muestra el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, y la ministra de Defensa, María Dolores Cospedal, quienes sólo han transmitido palabras y ningún hecho a la Guardia Civil (y a la Policía Nacional), el PSOE ha decidido que no hay mejor vía para sacar adelante las peticiones históricas de los componentes de la Guardia Civil que presentar leyes para debatir y aprobar en sede parlamentaria. Cuestión bien distinta, y eso retratará a algunos y algunas, es que se aprueben y el Gobierno las acepte. Porque cabe la posibilidad de recurrir su validez al carecer de dotación presupuestaria como vienen haciendo desde el comienzo de la legislatura con todas aquellas leyes que el PP no aprueba.
La primera de las Proposiciones de Ley se refiere al Régimen del Personal de la Guardia Civil. Esta iniciativa plantea como opción cubrir puestos en las escalas de oficiales y suboficiales que, con la legislación actual, quedan vacantes y que permitiría dar fluidez en la modificación de plantillas en el futuro. La Proposición de Ley lo que promueve es que todo guardia civil que comience a prestar sus servicios en otro organismo, con el fin de que su puesto no quede vacante, pueda ser ocupado por otra persona.
El objetivo de esta iniciativa es garantizar la cobertura de plazas y que el gasto en personal sea acorde al número de plazas en plantilla y, además, fomentar la igualdad dentro de la Guardia Civil, eliminando un privilegio con el que sólo cuenta en la actualidad la escala más alta en el escalafón y quienes pueden tener acceso a la misma.
La segunda Proposición de Ley alude a la Ley Orgánica 14/2015, de 14 de octubre, sobre el Código Penal Militar. Con esta ley se quiere, al fin, recoger una demanda histórica de los integrantes de la Benemérita, como es sacar a la Guardia Civil del marco del Código Penal Militar. Porque si bien su estructura es militar, al final sus funciones policiales y sociales divergen mucho de las Fuerzas Armadas en sí.
El significación política y grupal de esta propuesta es amplio pues permite dar una solución a muchas de las demandas que tradicionalmente han sido defendidas por las asociaciones y que tienen que ver, especialmente, con los derechos de los guardias civiles y con la libertad de las asociaciones para poder defenderlos.