La situación social de nuestra región requiere algo más que pregones, discursos que apuntan a una mayor inflación regional, cambio de gestores pero con la misma política o declaraciones de buenísimas intenciones (como “estamos trabajando….”).
La pérdida de poder adquisitivo, de nuestros mayores, se acentúa. Esto quiere decir que el instrumento que fue creado para garantizar las pensiones, se ha esfumado hasta un 87,88% (Diario.es 12/17). ¿En que se habrán gastado el dinero?, ¿Por qué consumimos mucho más de lo que recaudamos?, ¿por qué con el dinero de todos los españoles se compran bancos?, ¿por qué se compran autopistas fracasadas?
Hay asuntos trascendentales que no deberían ser objeto de demagogia, me refiero a las pensiones y las cuestiones sociales como la seguridad social. Esta es un bien nacional que debe preservarse a toda costa, lo que exige un gran acuerdo político y social entre los grandes actores del sistema, que garantice su sostenibilidad. Pero para mantener las pensiones se necesita generar empleo y un relevo generacional que al día de hoy no existe.
Por otro lado, lo mires como lo mires, sorprende la falta de gancho que tienen nuestros embajadores murcianos ¿cómo es posible que con 5 diputados del PP, 2 del PSOE, 2 de Ciudadanos y 1 de Podemos, que se supone defienden los intereses de nuestra región en las Cortes Generales, sin embargo, el pasado año se rebajó la inversión en la región casi un 20%, y Canarias, con 1 diputado subió 270,28 millones €, un 3,1% más que en 2016? (LO 4/17)
No resulta raro, que nuestra región, se endeude tanto. Y es que en definitiva se trata del problema de siempre, que no acaba de solucionarse. Necesitamos una financiación de acuerdo con nuestras necesidades. Un requerimiento que nuestros representantes no han sabido demandar ni negociar. ¿Cómo se entiende que tras 40 años de democracia, estemos a la cola de la cultura (LV 1/18), a la cola en servicios sociales (LV 12/17), a la cola en personal sanitario (Diario.es 3/18).
No me extraña que en Murcia hayan surgido varios partidos de corte regionalista. Formaciones que trabajen, por su tierra lo que otros no han hecho, nunca (por eso de la partidocracia). También es verdad que no todos “los nuevos”, son iguales. A unos se les ve el plumero y a otros se le ve experiencia, honestidad y elevada cualificación de sus integrantes (invito a que se compruebe). Unos con trabajo desde hace mucho tiempo, y otros que hacen de la política una agencia de colocación. Unos que dignificarán la política, por su trayectoria de honradez y otros… más de lo mismo.
Y es que la política que Murcia necesita, tiene que estar bañada primero de realidad, luego de políticos con la despensa llena, y a la postre con valentía e inteligencia, necesarias para poner nuestra región donde se merece. En resumen es la hora de evaluar el papel de los políticos y no hacer tanta política de papel.