El Gobierno de Pedro Sánchez ha declarado la guerra a las empresas que contraten “falsos autónomos”, un inmenso fraude laboral que afecta a miles de trabajadores en todo el país. Y en el punto de mira está la multinacional aseguradora Mapfre, que en los últimos meses sido objeto de numerosas denuncias por parte de exdelegados de la compañía que aseguran haber sido contratados mediante esta práctica laboral, según informó Diario16 en exclusiva y en sucesivas entregas.
La Asociación Liberados de Mapfre (LM), una organización que agrupa y representa a empleados despedidos del sector, se está encargando de canalizar las denuncias de los trabajadores supuestamente afectados y de ponerlas en conocimiento de la Inspección de Trabajo. Desde el pasado mes de octubre, inspectores de este organismo oficial se han hecho cargo de la investigación y han comenzado a visitar oficinas de Mapfre en todo el país para reclamar documentación y comprobar si la compañía cumple con la legislación laboral vigente.
Según se ha sabido en las últimas horas, el Ministerio de Trabajo tiene previsto endurecer las sanciones a toda aquella empresa que contrate “falsos autónomos”. A partir de ahora los empresarios que incurran en estas prácticas irregulares podrían exponerse a una infracción grave sujeta a una multa de entre 3.126 y 10.000 euros por cada trabajador contratado mediante ese sistema. Así se recoge en el borrador de real decreto ley que prepara el Gobierno para su aprobación en el próximo Consejo de Ministros, según ha adelantado el periódico Cinco Días. De esta manera, se creará un nuevo tipo de infracción con sus correspondientes sanciones. Mediante esta normativa, Trabajo pretende evitar que −debido a que por primera vez la base mínima de cotización de los asalariados es mayor que la de los autónomos−, se produzca un trasvase del Régimen General de la Seguridad Social al de trabajadores por cuenta propia, convirtiendo a empleados con nómina en falsos autónomos.
El pasado 30 de octubre la Asociación Liberados de Mapfre presentó una serie de denuncias ante la Inspección de Trabajo que afectaban a toda la red de sucursales de Mapfre-España (unas 3.000 en total con cerca de 50.000 trabajadores). Tras ese primer paso, representantes de la asociación mantuvieron una reunión con un equipo de inspectores donde “explicamos con todo detalle la estructura comercial de Mapfre, basada casi en su totalidad en la utilización de falsos autónomos”, aseguran fuentes de LM.
Según la organización denunciante, Mapfre dispone de sucursales que están integradas por empleados de la compañía, un director y los llamados “tecos” (técnicos comerciales). Sin embargo, el mayor número de trabajadores de estas oficinas lo integran los APM (agentes profesionales Mapfre). “Estos últimos son agentes exclusivos, presuntamente falsos autónomos”, aseguran las fuentes consultadas de LM.
La asociación explica que la empresa que cotiza en el Íbex 35 también dispone de sucursales “cuyo responsable es un agente exclusivo (delegado), presunto falso autónomo”. En ese tipo de oficinas trabajan los conocidos como “gecos” (gestores comerciales), “también falsos autónomos o empleados irregularmente por el delegado, por imposición de Mapfre”, añade la denuncia de LM.
Según la asociación, el Ministerio de Trabajo ha iniciado ya actuaciones de inspección contra Mapfre en toda España. En las últimas semanas se están sumando a la asociación no solo delegados despedidos por Mapfre, sino también “numerosos delegados en activo” que han denunciado su situación laboral ante los inspectores en sus respectivas provincias. La Asociación Liberados de Mapfre recuerda que ofrece a todos sus asociados “apoyo, asesoramiento y defensa jurídico-laboralista” y anima a denunciar el supuesto fraude de los falsos autónomos.
“Como resultado de las actuaciones inspectoras, a estos delegados se les ha dado de alta de oficio en la Seguridad Social, se les reconoce los años trabajados para cualquier prestación (jubilación, etc), el derecho a indemnización por los años trabajados en caso de despido, la devolución de los últimos cuatro años de lo pagado como autónomo, sanción a Mapfre y obligación de cotización de los últimos cuatro años. Además de un salario acorde a su situación como responsable-director de sucursal”, aseguran las fuentes de la asociación que defiende los derechos de los agentes de seguros.
“La estructura comercial de Mapfre deberá cambiar si quieren mantener sus actuales sucursales. Deberán tener al frente de ellas personal de la empresa y no agentes exclusivos ‘falsos autónomos’ o transformar esas sucursales y convertirlas en agencias autónomas e independientes (sin órdenes y objetivos), con publicidad exterior a nombre del agente exclusivo, que no conduzca a engaño a los clientes”, añade LM.