La Comunidad de Madrid ha culminado los trabajos de restauración de dos esculturas del maestro Pedro de Mena, uno de los escultores barrocos más célebres de nuestro país. De este modo, se han recuperado las obras San José con el Niño e Inmaculada Concepción, ambas datadas en el siglo XVII, ubicadas en el Real Monasterio de Santa Teresa de Carmelitas Descalzas, en Madrid.
El consejero de Cultura, Turismo y Deportes, Jaime de los Santos, ha visitado hoy el monasterio y ha destacado el “compromiso del Gobierno con la conservación y puesta en valor del Patrimonio histórico regional, un legado cultural que tenemos la obligación de proteger y recuperar”.
Pedro de Mena (1628-1688) se formó en Granada, su ciudad natal, en el taller de su padre, Alonso de Mena. La actividad al frente del taller, a la muerte de su padre y trabajando junto a Bernardo de Mora, le proporcionó encargos eclesiásticos en iglesias y conventos granadinos. Más tarde viaja a Málaga para hacerse cargo de la sillería del coro de la catedral; a Madrid, por encargo de la corte; y a Toledo, entre otros lugares, donde realizó un San Francisco, obra cumbre de la imaginería española.
La obra San José con el Niño está datada en 1686. Se trata de una escultura representativa de los modelos de Mena, en la que el artista presenta al niño Jesús caminando junto a la figura de San José, que lo protege con la mano derecha. Esta escultura presentaba deterioros, pérdida de policromía y bordes descarnados, que han sido subsanados gracias a los trabajos de restauración emprendidos por la Comunidad de Madrid.
En cuanto a la escultura Inmaculada Concepción, fechada en el mismo año (1686), muestra la evolución de Mena desde sus inicios con Alonso Cano como referente, hasta llegar a una representación más personal. Esta Inmaculada aparece de cuerpo entero, figura estática y simétrica, que se presenta en actitud de recogimiento con las manos unidas. Antes de su restauración, esta obra presentaba visibles grietas, pérdida de policromía y bordes descarnados en el manto.