El gaditano Ernesto Alba ha resultado elegido nuevo secretario general del Partido Comunista de Andalucía, y por tanto de su Comité Central, en pugna con el diputado sevillano Miguel Ángel Bustamante. El resultado ha sido de 171 votos a 105 a favor de Alba, que ha clausurado el XII Congreso del PCA celebrado en Albolote (Granada). El nuevo Comité Central los formarán 38 personas del equipo de Alba y 23 de Bustamante.
Alba ha manifestado en el discurso de clausura que el proyecto que encabezará es un “proyecto de ruptura” con la sociedad capitalista. “Un proyecto que, además de disputar el voto, disputa la complicidad con nuestros iguales, cabreados, como nosotras, con las instituciones del régimen, contra la troika, contra un gobierno rehén y contra una presidenta de la Junta de Andalucía rehén de sí misma” ha dicho el nuevo secretario general.
Desde Andalucía el PCA pretende llevar la ruptura al resto de España, ser una referencia en los demás lugares porque las condiciones materiales de la vida en Andalucía se enmarcan en la pobreza y la precariedad. Todo ello culpa de un gobierno andaluz “cortijero e irresponsable”. El 28 de Febrero mostró el camino, según los comunistas, para conformar un “Bloque Andaluz de ruptura democrática”
Para Alba el fin del XII Congreso no ha sido debatir con quién pactar en las elecciones, ni obtener un pequeño hueco en las instituciones sino “ir más allá de eso”. Por eso quieren seguir construyendo un proyecto dentro de IU que recoja lo bueno que existe e ir más allá en la defensa de la clase trabajadora. Por eso se hace un llamamiento a las demás organizaciones que quieren una ruptura democrática para confluir e impugnar el sistema capitalista. Lo que significaría acabar, en cierto modo, dando por finiquitada IU.
La construcción de ese bloque alternativo tiene que tener como foco “la superación del trabajo institucional en favor de frentes de lucha organizados sectorialmente y otorgar un protagonismo especial al movimiento feminista, que enfrenta retos importantes provocar por la recomposición del capital a la salida de la crisis”. Se pretende tejer redes de solidaridad que supongan la unión de luchas y, por ello combatir el “falso discurso de los trabajadores con privilegios y corporativismo”.
En el plano internacional el PCA entiende que Andalucía juega un especial papel en la “lucha por la hegemonía del capital que encabeza Estados Unidos”. Por ello hay que abandonar la OTAN, la Unión Europea y se eliminen las bases militares. Así los comunistas andaluces creen que hay solidarizarse “con el frente antiimperialista y con las luchas justas o de emancipación que se libran en todo el mundo, en territorios como Palestina, Sáhara, Cuba, Venezuela o Colombia”.
En el principal documento político aprobado Unir las luchas: reconstruir la conciencia de clase, el PCA explica que existe “una nueva realidad de la clase trabajadora de Andalucía” que debe ser articulada en favor de la luchas de distintos movimientos. Con esto se logrará la unidad de clase en la lucha contra la hegemonía capitalista que no sólo es local, sino global.