¡Por fin terminó el Mundial de fútbol! Para las huestes rojiblancas, pese a poder contemplar cómo cinco de sus jugadores han ocupado los tres máximos peldaños del fútbol mundial, no hay nada como el Atlético de Madrid. Se disfruta del fútbol –no se fíen de esos que dicen “me gusta el Atleti pero no el fútbol”, que luego te cuentan no-se-qué de jugadores maravillosos cuando ¿no has dicho que no te gusta el fútbol?- pero no es lo mismo. Alegres por Molina, De Paul, Correa, Griezmann y Grbic, pero la vuelta al tajo con la Copa del rey es otra cosa.
Sí, porque el jueves 22 el Atlético de Madrid se enfrentará al Arenteiro (equipo que ha pretendido hacer su agosto en diciembre con la afición rojiblanca) en tierras gallegas. Y ahí empiezan los sudores. Habiendo quedado eliminados de competiciones europeas, la Copa parece el título más asequible este año. El problema es que las sensaciones antes del parón por el Mundial no han sido buenas. Bien al contrario han sido nefastas. Y cualquier aficionado rojiblanco se pregunta si este parón habrá servido para que jugadores y cuerpo técnico reseteen las mentes y cojan fuerza en las piernas y el alma.
La prueba contra la Ponferradina la semana pasada (en celebración del centenario del equipo leonés) ha dejado dudas. Muchas. La pachorra con la que se desenvolvieron los “supuestos” titulares, en comparación con las ganas de los jugadores del filial, ensombraron las posibles esperanzas sobre la recuperación anímica. Como ha demostrado el último mundial, andando no se gana ni a las tabas. Y para ese encuentro no se dispondrá de los cinco jugadores citados anteriormente. En principio hay jugadores de calidad más que de sobra para vencer pero… tendrán ganas.
En las últimas dos semanas, los nombres de Cunha, João Félix, Felipe, Hermoso o Carrasco han sido filtrados desde el club como posibles salidas. Parece que lo del delantero brasileño está cerrado, a la espera de llegar al 1 de enero, y por ello está entrenando al margen de sus compañeros desde que volvieron. El resto debería estar disponible para el Cholo Simeone pero ¿le pondrán ganas o se reservarán si tienen algo medio hablado? El mundial de los que han vuelto antes, salvo Morata, ha sido bastante pobre. Con algún destello pero poco más. A la afición le haría ilusión la Copa y lo que no está claro es que a los jugadores les suceda lo mismo.
Los pajiplantilleros y los insiders están comenzando a vender y comprar sin contar que Miguel Ángel Gil lo que pretende es cuadrar las cuentas y que se apañe el entrenador con lo que quede. Siempre ha actuado así. Si saliesen Félix y Cunha, poniendo una cifra loca, por 140 millones vendría sustituirles Nadie Ahora, jugador que siempre se ha vinculado al equipo rojiblanco. Eso sí, podría pagar los casi cien millones en sueldos que debe a la plantilla y que igual tienen alguna incidencia en el rendimiento. Como a Giménez no se les espera (curioso que jamás se lesiones con Uruguay), los que quedan son los que son y da miedo.
El Cholo Simeone nunca ha sido de jugársela con canteranos. Ha preferido lo seguro y en esta ocasión no será diferente. Volverá al 5-3-2 de la sosería para ubicar a todos los que tiene de la primera plantilla y luego ya se verá. Hasta después de año nuevo no volverán los demás jugadores y no se sabe si volverán con ganas –vamos, como lo que han hecho en el mundial algunos- o como lo que han demostrado en el Atleti. Un equipo con cinco campeones del mundo (hace pocos años inconcebible) y que no lo demuestran con las rayas canallas… algunos. Ganas de ver al Atleti, pero con cierta actitud de reserva por entrenador y jugadores.
Hay liga el 29 y espero que estén todos los mundialistas que faltan.