Susto en el cuerpo ante un equipo que se sabía se iba a dejar hasta el alma para vencer. No tenía nada que perder el Cacereño y salió a asustar al Atlético de Madrid, algo que consiguió durante un buen tramo del partido. Justo hasta que Diego Pablo Simeone entendió que el cachondeo se había acabado y había que ganar por lo civil y lo criminal. Remontada, que en otros lares achacarían a la épica o espíritu de algo que no es el árbitro pero todo el mundo sabe que sí, ducha y para casa a descansar que el Sevilla hace visita el domingo.
En el autobús de vuelta, ya que Extremadura sigue estando en el tercer mundo para la clase política al completo, seguramente haya ido rumiando Simeone lo sucedido. Más allá de tal o cual fallo ante la portería contraria, habrá apreciado el entrenador argentino que puede contar con menos jugadores de los que hay en realmente en la plantilla. De hecho, algunos han firmado su sentencia de muerte con el entrenador. Son muchas las oportunidades otorgadas —está cansado de decir que lo importante no es la cantidad de minutos sino la calidad— a varios jugadores sin llegar a responder.
Al comienzo de la temporada se le pedía al Cholo que, por lo menos, debía apretar a los jugadores para que no diesen vergüenza en actitud y, a ser posible, aptitud. Pues eso, alguno que otro tiene actitud pero carece de aptitud, también están los que ni aptitud, ni actitud. Estos últimos deberían comenzar a pensar en aceptar cualquier oferta que les llegue en el mercado de invierno. Más vale tener una plantilla corta con jugadores que estén para jugar, que tener que soportar agresiones visuales y deportivas como las que ofrecen unos cuantos.
A Miguel Ángel Gil Marín le toca rascarse el bolsillo y cerrar lo que dejó a medias durante el mercado estival, aunque también puede recaudar algo, monedillas siquiera, por unos cuantos que parecen no haber entendido la camiseta que llevan puesta. Y no será porque el entrenador no lo advirtiese antes del partido. Lo hizo y parece que nadie se ha dado por entendido. Pues que preparen maletas ya que han firmado su sentencia de muerte… y alguno del cuerpo técnico también, pues no es posible que algunas cuestiones tácticas estén tan mal trabajadas. ¡A disfrutar del puente porque ha comenzado con película de arrancarse los ojos!