El nuevo año hidrológico, que comenzó el pasado 1 de octubre y que finalizará el 30 de septiembre de 2018, se inicia en Almería con un déficit hídrico de 191,8 Hm3. Este déficit es consecuencia de dos factores fundamentales que se han conjugado para reducir de forma importante la disponibilidad de agua para el riego agrícola, según señalan los responsables de la Mesa del Agua de Almería que celebraron ayer una reunión para analizar la situación actual.
En primer lugar, la sequía ha provocado la suspensión temporal de los trasvases del Negratín-Almanzora y del Tajo-Segura, debido a la disminución de las reservas en los embalses de cabecera que los alimentan. En segundo lugar, la ausencia de infraestructuras adecuadas que permitan el aprovechamiento de otros recursos hídricos que, aún estando disponibles en Almería, no pueden incorporarse al riego agrícola por falta de inversiones públicas.
A los 78 Hm3 que ha perdido la Comarca del Almanzora por la suspensión de los dos trasvases mencionados, hay que añadir los 15 Hm3 de la desaladora construida por Acuamed en Villaricos y que se encuentra fuera de servicio desde 2012. Además, la ausencia de tratamiento terciario en el campo de Níjar y en los municipios de Roquetas de Mar, Vícar y El Ejido, la concesión de nuevos cambios de uso en el campo de Tabernas, el corte de agua a los regantes del Bajo Andarax, la recuperación de la desaladora de Rambla Morales o la ausencia de una planta desalobradora en la Balsa del Sapo (El Ejido) son algunas de las actuaciones que se encuentran pendientes de ejecución, de reparación o a falta de autorización administrativa.
En total, la Mesa del Agua ha presentado diez actuaciones prioritarias para resolver el déficit hídrico de la provincia: finalización de la “Autovía del Agua”, reutilización de aguas depuradas, ampliación de la desaladora de Carboneras, recuperación de la desaladora de Rambla Morales, construcción de una desalobradora en la Balsa del Sapo, ampliación de la desaladora de Balerma, regularización de los derechos de riego, plan de consolidación de riegos y puesta en marcha de Juntas Centrales de Usuarios en las masas de agua sobreexplotadas. Además, se reclaman las medidas oportunas para implantar las energías renovables en las plantas desaladoras, a fin de reducir el coste energético del proceso para abaratar el precio final del agua.
Déficit polhídrico
La Mesa del Agua considera que los casi 192 Hm3 de déficit se han generado a causa de un cúmulo de desacertadas decisiones políticas -‘déficit polhídrico’- que han conseguido situar a la agricultura almeriense al borde de la declaración de sequía, a pesar de que el río Andarax arroja al mar 15 Hm3 cada año, que la Balsa del Sapo tiene problemas de desbordamiento y que hay dos desaladoras terminadas pero sin funcionar. “La escasez de recursos para riego es consecuencia directa de la sequía mental en la gestión pública del agua”, ha manifestado el Portavoz de la Mesa del Agua, José Antonio Fernández. “La dejadez, la falta de previsión y la nula coordinación entre administraciones competentes ha provocado que, por ejemplo, la Comarca del Almanzora se encuentre en riesgo inminente de pérdida de cosechas y que los regantes del Bajo Andarax tengan que pagar casi un euro por metro cúbico de agua desalada, mientras que las aguas depuradas de la capital almeriense van directamente al Mediterráneo”, según Fernández Maldonado, quien ha recordado que si el proyecto de la “Autovía del Agua” estuviera finalizado ahora podrían enviarse riegos de socorro a las zonas más afectadas con caudales que solidariamente cederían las áreas menos afectadas.
Déficit “polhídrico” en Almería. Octubre 2017 (En Hm3/año)
- Suspensión Trasvase Negratín-Almanzora………… -43
- Suspensión Trasvase Tajo-Segura………………………. -15
- Desaladora del Bajo Almanzora, fuera de servicio…….. -15
- Ausencia de tratamiento terciario en Campo de Níjar…….. -0,8
- Ausencia ampliación desaladora de Carboneras………. -18
- Concesión de nuevos cambios de uso en Campo de Tabernas…….. -5
- Corte de agua a regantes del Bajo Andarax…………………………. -8
- Ausencia de tratamiento terciario en Roquetas de Mar y El Ejido…….. -10
- Ausencia planta desalobradora en Balsa del Sapo…………… -8
- Ausencia de autorización para nuevos pozos en acuífero superior……. -12
- Pérdida de agua por filtraciones en Pantano de Benínar…………… -7
- Ausencia de conexión Presa de Rules-Pantano de Benínar………….. -50
TOTAL……………………………………………………………………………………………………… -191,8 Hm3
Fuente: Elaboración propia
Ante la dramática situación que ya padecen los regantes de varias zonas productoras de la provincia, la Mesa del Agua ha reclamado a todas las administraciones competentes que demuestren la “voluntad real de trabajar codo con codo con los afectados para estudiar urgentemente las soluciones necesarias a corto plazo que garanticen el mantenimiento de la actividad agraria”. Además, la Mesa del Agua ha hecho un llamamiento a todos los parlamentarios almerienses en Sevilla y Madrid para que el agua de riego necesaria para cubrir la demanda del sector agroalimentario almeriense sea una prioridad política en sus agendas de trabajo. “Llevamos cinco años esperando la reparación de la desaladora de Villaricos y nadie, absolutamente nadie, ha conseguido que una planta que costó más de 77 millones de euros se vuelva a poner en marcha”, ha recordado el portavoz de la Mesa del Agua, quien ha añadido que “en esos cinco años todos los regantes almerienses hemos contribuido a pagar los casi 5 millones de euros de los sueldos de nuestros parlamentarios, pero no hemos recibido nada a cambio”.
La Mesa del Agua también ha reclamado a las administraciones competentes y a todos los grupos políticos con representación parlamentaria que “tomen conciencia del grave problema del agua y que no escatimen en recursos para remediarlo, ya que un descenso en la capacidad de producción de la agricultura almeriense dañaría gravemente la economía de toda la provincia”.
Manifestación el 16 de octubre
Por todo ello, la Mesa del Agua ha anunciado la convocatoria de una manifestación que se celebrará el próximo lunes 16 de octubre, junto a la desaladora de Villaricos. La movilización comenzará a partir de las 10 de la mañana y contará con la asistencia masiva de regantes y de representantes de las principales empresas de comercialización de la comarca.
“Justicia con el Almanzora: ¡¡agua ya!!” es el lema elegido para esta protesta, cuyo objetivo es reclamar la reparación urgente de la desaladora de Villaricos. Por el momento, la reparación de la planta es la opción más rápida para conseguir agua de riego para una comarca que está sufriendo actualmente la incidencia más acusada de la sequía.
La falta de riegos, motivada fundamentalmente por la suspensión de los trasvases, ha puesto en jaque la producción de hortalizas, verdura de hoja, cítricos y frutales en más de 23.000 hectáreas. Los productores de la zona ya se han visto obligados a reducir la superficie de producción y no se descarta la pérdida total de cosechas en algunos cultivos, lo que tendría catastróficas consecuencias comerciales.
Mesa del Agua
La Mesa del Agua está formada por la Federación de Regantes de Almería (FERAL), Aguas de Almanzora, SA, Junta Central de Usuarios de Aguas del Valle del Almanzora, Comunidad de Usuarios de la Comarca de Níjar (CUCN), Comunidad General de Usuarios de Aguas Depuradas (CGUAL), Junta Central de Usuarios del Poniente Almeriense, Junta Central de Usuarios de Adra, Asociación de Regantes de Andalucía (AREDA), Regantes de Almería (REGA), ASAJA, COAG y UPA, ASEMPAL y Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Almería y Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Almería.
La Mesa del Agua tiene los objetivos de promover, recomendar e impulsar toda clase de acciones que tengan por objeto la mejora en la gestión integral del ciclo del agua en la provincia, articular el buen uso de sus recursos hídricos y procurar la armonización de los diversos intereses económicos y sociales. Además, recogerá cuantas iniciativas partan de todos los sectores sociales de la provincia de Almería, públicos y privados, encaminadas a solucionar los problemas derivados de la limitación del desarrollo de la provincia por la escasez de recursos hídricos.