Bajo la etiqueta 19J#ALERTAFEMINISTA, diferentes plataformas feministas han convocado, el próximo 19 de junio, concentraciones ante los ayuntamientos de varias ciudades españolas para denunciar las violencias machistas y reclamar que los Presupuestos Generales del Estado 2017 aumenten su dotación presupuestaria en las partidas correspondientes a la igualdad de género y a la lucha contra las violencias machistas.
CCOO advierte que hacer frente a la violencia contra las mujeres, que no cesa, debe ser una prioridad absoluta para Gobierno, Administraciones públicas y la sociedad en su conjunto. El sindicato ha denunciado en reiteradas ocasiones que los PGE 2017 mantienen los recortes presupuestarios en políticas de igualdad acumulados en los años de crisis; unas partidas que se han visto reducidas desde que gobierna el PP en un 37%, más de la tercera parte, y un 41,2% desde 2010. Asimismo, CCOO denuncia que estos PGE 2017 tampoco contemplan mejoras presupuestarias para hacer frente a la lucha contra las violencias machistas, que se mantienen un 9% por debajo de lo asignado en 2011 y un 10,8% menos que en 2010.
Estos déficits en los presupuestos, junto a los déficits detectados en la aplicación de la Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, hacen que CCOO reitere sus propuestas de mejora en los escenarios en los que está presente.
CCOO considera que la lucha contra la violencia hacia las mujeres debe ser una prioridad en la agenda política del Gobierno, que debe afrontarse como una cuestión de Estado y dotarse con los recursos de todo tipo, incluidos los presupuestarios, necesarios para su prevención y erradicación. También reclama, junto a la Plataforma 7N de la que CCOO forma parte, que se escuche a las organizaciones de mujeres implicadas activamente en la lucha contra la violencia machista.
El sindicato subraya que la violencia de género es una realidad que se ha visto agravada por la actual situación de crecimiento de las desigualdades sociales y de género, producidas por el impacto de las reformas (incluidas las laborales), recortes, desempleo masivo y reducción salarial (que afectan en mayor medida a las mujeres), que son castigadas además con una brecha salarial de género que aumenta. Como consecuencia de todo ello, han crecido la pobreza en general, y la pobreza laboral en particular, que en la actualidad tiene rostro de mujer.