En la tarde del jueves se ha producido un atentado terrorista en Las Ramblas de la ciudad de Barcelona. Mediante la utilización de una furgoneta y el atropello masivo, una célula yihadista ha sembrado el pánico y el terror en la ciudad condal. El atentado terrorista ha causado hasta el momento 13 muertos y 80 heridos, de ellos 15 en estado muy grave, según han confirmado desde la Generalitat.
Los Mossos d’Esquadra han confirmado la detención de dos personas en referencia al atentado cometido. Una de ellas sería Driss Oukabir, quien tenía antecedentes penales por violencia machista o abusos sexuales (según las distintas fuentes), y que se ha presentado en la comisaría aduciendo que le habían robado la documentación para alquilar los vehículos. Las fuentes policiales aún no han confirmado la identidad del otro detenido. Aunque aseguran que persisten en la búsqueda de más posibles miembros de la célula yihadista, que las mismas fuentes cifran en dos. Porque, a diferencia de otros atentados terroristas yihadistas, en este caso no se trata de un “lobo solitario” sino de una célula que habría logrado superar los controles de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
En la carretera de Sant Just Desvern, en plena Diagonal, se habría producido un tiroteo durante un control de la policía. Un vehículo habría intentado superar el control, por motivos aún sin confirmar, y se ha producido un tiroteo que habría acabado con la persona que conducía. Los Mossos están investigando si existe conexión entre el ocupante del vehículo con la célula yihadista que habría cometido el atentado.
Según desvela, El Periódico de Cataluña, la CIA habría avisado a los Mossos d’Esquadra que Barcelona y Las Ramblas podían ser objetivo de un atentado terrorista en la ciudad condal. Según el diario catalán la alerta se habría activado por aparecer, entre los próximos lugares que el Estado Islámico tendría como objetivos terroristas, la imagen de la Sagrada Familia. También se ha criticado la inexistencia de quitamiedos en Las Ramblas, pese a haberse solicitado desde el Ministerio del Interior al Ayuntamiento de Barcelona.
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha manifestado que no les van a doblegar aquellas personas que «utilicen la violencia. No dejaremos que una minoría acabe con nuestra forma de vida. Los catalanes som i serem tierra de paz». Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, ha insistido en que Barcelona no se va a doblegar ante este atentado. “Es un acto cobarde y miserable” ha dicho, pero que no va a conseguir cambiar el espíritu de “convivencia y diversidad” de la ciudad condal.