El Consejero de Agricultura de Andalucía, Rodrigo Sánchez Haro ha visitado una de las industrias oleícolas más importantes de la provincia de Almería. Se trata de la conocida y veterana almazara de “Las Canalejas” situada en el municipio de Cuevas de Almanzora y que dirige desde hace varias décadas el empresario Antonio Zurano, continuador de una dinastía de emprendedores en este ramo agrario que fundaron la empresa en el año 1924, estando por tanto en vísperas de cumplir el primer centenario, señala Tomás Zurano, padre de Antonio, quien tiene un hijo que posiblemente sea el continuador de la dinastía.
Durante su estancia en “Las Canalejas”, Rodrigo Sánchez conoció el origen, evolución, funcionamiento y futuro de esta almazara, deteniéndose especialmente en los procesos de llegada de la aceituna y su posterior molturación hasta ser envasada y retirada por los 4.500 clientes que tiene la referida industria, procedentes de toda la Comarca del Levante Almeriense, según el gerente de la almazara.
La almazara, recuerda Zurano, “empezó a trabajar en frío hace 20 años, antes que los demás, y eso no lo entendió entonces mucha gente, porque cuando se trabaja en frío hay más poso que el que trabaja en caliente. Ahora, el tiempo nos ha dado la razón porque nuestro aceite tiene mejor sabor y aroma, y eso nos ha traído más cliente y por tanto, hemos podido fidelizar la clientela”, asevera el empresario.
Otro dato importante aportado por Zurano, a preguntas del consejero Sánchez Haro, es que actualmente, la almazara trabaja para unos 2.000 empresarios de la comarca, lo que viene a representar una superficie aproximada de 3.500 hectáreas, lo que indica “el buen nivel” de gestión de la almazara cuevana.
Por último, Zurano adelanta que en breve acometerá una importante innovación tecnológica, actualmente en fase de preparación, debido a que el aceite de oliva, que es un producto alimenticio, “tiene más de farmacéutico”. En concreto, una firma especializada va a instalar unos reactores cerrados” encaminados a que el aceite “no pierda el polifenol, que es el antioxidante del aceite de oliva. Estamos ante un producto nutracéútico”, recuerda Zurano.
Estas innovaciones son acogidas con entusiasmo por el político socialista natural de Turre, que considera que hay que “seguir poniendo en valor la agricultura como motor económico de la zona”.
Más previsiones de futuro para ampliar el negocio pasa, según Antonio Zurano, por la próxima construcción de una nave de 1.000 metros cuadrados de superficie que servirán para montar una exposición con maquinaria de almazara desde el siglo XVII en adelante, aunque la mejor máquina procede del siglo pasado, cuando “éramos los más importantes en este sector”. De esta forma, la almazara “Las Canalejas” dispone de una máquina del año 1906, fabricada en la localidad alicantina de Alcoy, aunque ahora algunos países extranjeros “nos llevan ventaja”, afirma Zurano.