El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado, durante su intervención en el Debate sobre Política General, la inversión de más de 700 millones de euros destinados a la “construcción, reparación y mejora” de los centros educativos de la Comunitat Valenciana. Se trata de “un proyecto que supone la mayor iniciativa de este tipo desde la constitución del autogobierno”, tal y como ha indicado Puig.
El plan contempla la colaboración con todos aquellos ayuntamientos del territorio valenciano que quieran sumarse, puesto que “son quienes mejor conocen las necesidades educativas de sus pueblos y ciudades”, y que podrán también avanzar en la tramitación de los expedientes para que la construcción y mejora de los centros comience cuanto antes. Así, el dirigente socialista valenciano también ha indicado que, el texto que define este proyecto, se aprobará en las próximas semanas y supondrá la “aceleración de todos los plazos para que los estudiantes tengan los colegios e institutos que se merecen”.
La reparación del sistema educativo ha sido uno de los ejes principales del discurso del president, en el que ha resaltado la labor desarrollada por su Gobierno para cumplir con el pueblo valenciano, que hace dos años expresó su voluntad “de empezar un tiempo nuevo y de cambio”. De hecho, ha asegurado que ahora la Comunitat Valenciana es un territorio “más justo, más próspero y más respetado” que en tiempos del PP, que cuenta con un proyecto de futuro “que va más allá de la gestión del presente” y que ha sido capaz de unirse en sus reclamaciones, como en el caso de un nuevo modelo de financiación.
Una Comunitat más justa, próspera y respetada
El jefe del Ejecutivo valenciano ha insistido en que la Comunitat Valenciana “hoy está mejor que hace dos años”, puesto que las familias valencianas han experimentado una “reparación de sus derechos”, a través de las medidas impulsadas por el actual Consell, como ayudas al copago, al material escolar o a la dependencia. “En solo dos años, hemos rebajado la pobreza en más de cuatro puntos, mientras que, en el conjunto del Estado, se ha visto reducida solamente en 1,3 puntos”, ha declarado el Puig.
Respecto al sistema de dependencia, Puig ha destacado que la Comunitat Valenciana “ha pasado de estar en el furgón de cola a ser la tercera autonomía que más mejora, lo que significa que se han incorporado al sistema más de 30.000 personas nuevas y se va a ampliar el personal valorador, que pasará de 18 a 450 profesionales”.
Además, el president ha explicado que, el próximo año, se reforzarán los centros de valoración de la discapacidad con 6 nuevos equipos: 3 en Valencia, 2 en Alicante y 1 en Castellón, para impulsar la reducción de la lista de espera.
Además de esta reparación de derechos, Puig también se ha referido a la “reconstrucción económica” que está experimentando la Comunitat gracias a un escenario político de “estabilidad, honradez y diálogo que el Gobierno ha restablecido”.
El jefe del Consell ha alabado la mejora de todos los indicadores económicos, “sin excepciones”, entre los que ha destacado el descenso del desempleo, “el más bajo desde 2009”. “Desde el inicio de esta legislatura, hay más de 120.000 valencianos que han encontrado trabajo gracias al gran esfuerzo conjunto llevado a cabo por empresas y trabajadores”, ha querido exponer.
Asimismo, ha hablado del respeto que, en estos dos años, ha recuperado la Comunitat Valenciana, como demuestra la normalización de las relaciones con las instituciones europeas. “Hemos pasado de estar en la cola de todos los indicadores, a liderar el desarrollo; hemos pasado de estar ausentes en Europa a recuperar la confianza perdida; y hemos pasado de ser invisible en España a ser un actor importante en el debate”, ha concluido Puig, en referencia a la última Conferencia de Presidentes, en la que la Comunitat Valenciana fue una de las impulsoras de la reforma del sistema de financiación autonómica.
Un proyecto de futuro
El jefe del Ejecutivo valenciano ha centrado parte de su intervención en recordar a la Cámara y a los ciudadanos que su Gobierno tiene un proyecto de futuro para la Comunitat Valenciana. En esta línea, ha concretado una serie de reformas destinadas a preparar a la Comunitat para los retos sociales, económicos y medioambientales a los que tendrá que enfrentarse en el futuro, así como a impulsar una agenda de “reformas democráticas e institucionales”.
Se trata de un proyecto que, tal y como ha indicado Puig, “asume lo acordado en el Pacto del Botánico, pero va más allá de los tiempos electorales, y está desarrollado para pensar en el horizonte de una generación”. Es por ello que se ha referido al pacto valenciano contra la violencia de género, que se firmará el próximo 18 de septiembre y que marcará un “hito histórico” en la defensa de la libertad y la igualdad de todas las mujeres en la Comunitat Valenciana.
Por otro lado, y en esta misma línea, ha hablado del reto sanitario, y ha destacado que, aunque ahora la salud tiene un coste, ha dejado de tener un precio. “Hoy la sanidad pública valenciana ha conseguido ser 220 millones de euros más eficiente al año”, ha declarado Puig. Asimismo, ha anunciado que la Generalitat tiene previsto impulsar el Plan Ribera, que conllevará una mejora en la atención primaria, así como en las instalaciones de los centros de salud de este área que todavía están pendientes. Puig ha puesto el acento en la recuperación de la titularidad del Departamento de La Ribera en 2018, y ha adelantado que se van a iniciar los trámites para hacer lo mismo con el de La Marina.
En el apartado de vivienda, ha explicado que 2018 será también el año en el que se presentará el Plan Plurianual de rehabilitación y ampliación del Parque Público de Viviendas Autonómico. Además, el president ha anunciado que el Plan Renhata para la potenciación de energías renovables en las viviendas particulares, “una iniciativa que está siendo un éxito”, tendrá una segunda convocatoria que aumentará el número de beneficiarios.
Otro de los pilares fundamentales del citado proyecto de futuro guarda relación con la economía. “Nuestro gran reto económico es crear más trabajo y que sea de mayor calidad”, ha reiterado Puig, quien ha fijado como eje central de esta estrategia la mejora de la educación.
Así, tras la nueva asignación de fondos de garantía juvenil a España, Puig ha asegurado que el Gobierno valenciano solicitará al ministerio que sean los servicios públicos de empleo autonómicos quienes los gestionen, con el objetivo de duplicar la partida del Plan Avalem Joves Plus y alcanzar los 8.000 beneficiarios el próximo año.
“Así mismo, dentro de los planes de empleo dirigidos a los parados de larga duración, tendrán prioridad aquellos que se acercan a la edad de jubilación, para incrementar sus cotizaciones y que puedan tener una pensión digna”, ha explicado Puig.
Unidad para solucionar el “problema valenciano”
La tercera y última área del proyecto de cambio iniciado por el actual Gobierno autonómico la constituye la inaplazable reforma del sistema de financiación. “Nuestra unidad como pueblo para solucionar el problema valenciano es una expresión fundamental del cambio que ya hemos iniciado”, ha indicado Puig a este respecto.
El jefe del Consell ha especificado que el acuerdo alcanzado en la Conferencia de Presidentes, que establece que el nuevo modelo de financiación esté listo para 2018 debe cumplirse, por lo que ha garantizado que la agenda de contactos entre la Generalitat y el Gobierno central se mantendrá e incluirá reuniones con el Ministerio de Hacienda y el Fomento. Puig se ha referido a esta cuestión como un momento histórico y ha pedido que se mantenga la unidad para afrontar esta reivindicación, que es de todos y todas, y que debe quedar al margen de cualquier debate partidista.
Durante su discurso, también ha tenido palabras de condena para el terrorismo, y ha apelado a la «colaboración internacional reforzada por una actuación local» para prevenir la exclusión y el odio que genera el fanatismo.
Por otro lado, en cuanto a la crisis territorial, ha asegurado que falta “comprensión y respeto”, así como reformas de calado en la arquitectura institucional actual para garantizar “la igualdad de los ciudadanos y la singularidad de los territorios”, algo que, tal y como ha explicado, ya le trasladó a Rajoy la pasada semana.