El populismo desconsiderado existe en una oposición poco ética. Sólo basta con analizar y profundizar en los discursos que pronuncia el candidato presidencial del partido opositor, Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández. Escucharle decir “ayer estando nosotros en Boston, los compañeros que intervienen nos dicen que hay un tema de 10 dólares que se pagan cuando se va a la República Dominicana. ¿Que qué haríamos nosotros en el Gobierno con esos 10 dólares? Digo, bueno, 10 dólares me parece tan poca cosa que si eso es de interés de los dominicanos que residen en Estados Unidos, esos 10 dólares se van a quitar”. Esa declaración es una burla a toda la diáspora dominicana, porque durante sus años de gobierno esos impuestos aplicables a los turista que entraban en Republica Dominicana (incluyendo a los propios dominicanos residentes en el exterior), permanecieron y nunca hubo intención de eliminarlos.
A Leonel le falta la memoria histórica, lo que da la impresión de que no esta apto para gobernar, porque lo que en la actualidad para él es tan simple, existía en su época de gobierno y es cuando realmente se potencia, dejando como recaudadores a la empresa privada que gestionaba entonces el aeropuerto.
Desde el 2008 hasta el 2012, Leonel y su gobierno le permitieron a esa empresa la recaudación de 10 dólares a aproximadamente 36.2 millones de turistas que ingresaron al país caribeño, lo que equivale a un aproximado de 360 millones de dólares. Sin embargo, a la empresa no le exigían las cuentas para que ingresase ese dinero recibido al Estado, hasta pasado un año o más, es decir, que ese tiempo era permitido para rendir cuentas ante el Ministerio de Hacienda. Por ello, se puede suponer que ese dinero les permitió a los socios de esa compañía invertir en otras actividades empresariales, posiblemente, millones y millones de dólares, sin tener que pagar a los bancos ningún tipo de interés.
El ahorro que podía obtener una empresa con ese dinero del Estado sin tener que pagar los intereses de los prestamos bancarios era significativo, solo basta comparar la política monetaria de esos años y por sí solo todo queda evidenciado. En diciembre del 2004 la política monetaria, según el Banco Central de la República Dominicana, estaba ubicada en 7%, en el mismo mes, pero del 2005 en 10%, en el 2006 en 8.00%, en el 2007 en 7.%, en el 2008 en 9.50%, en el 2009 en 4%, en el 2010 en 5%, en el 2011 en 6.75% y en el 2012 en 5.00%.
¿Podrá Leonel en algunas de sus alocuciones en los Estados Unidos decir por qué permitía ese tipo de administración y si lo sabe, que diga a dónde fueron dirigidos esos beneficios que le complacieron a sus amigos de la época? Entonces, cuando conteste esto a la opinión pública, tendrá el derecho de poder hablar ahora de los 10 dólares. Por supuesto que a los dominicanos nunca se le debió de cobrar, pero ¿puede decir Fernández que fueron impuestos por el gobierno de Abinader? No, al contrario, con un nuevo estilo de gobernar ha puesto fin a un mal que por décadas permaneció entre los dominicanos que para ingresar a su país tenían que pagar como turistas.