Los cuatro primeros aviones C-101 llegaron el 17 de marzo de 1980 a la Academia General del Aire, en San Javier (Murcia), para servir como sistema de entrenamiento para los futuros pilotos militares. Casi 40 años después, el Ejército del Aire analiza detenidamente la posibilidad de jubilar este histórico avión como sistema de instrucción a los futuros pilotos, según publica El Confidencial Digital.
El análisis de sustitución comenzó a plantearse hace ya algunos años, con objeto de relevar en el sistema de enseñanza de la AGA a estas históricas aeronaves que han servido durante décadas para preparar a los pilotos militares españoles en su fase de formación.
En este mismo recinto militar de la Región de Murcia también se encuentran las aeronaves incluídas en la Patrulla Águila, dedicada a acrobacias y que dibuja en el cielo con humo la bandera de España.
Tras casi cuatro décadas de servicio, en los últimos años se han producido algunos accidentes mortales de militares que pilotaban C-101. Esta contingencia llevó a la cúpula del Ejército del Aire a ordenar una revisión exhaustiva de toda la mecánica y los sistemas electrónicos de los aviones que estaban en servicio.
Pero al mismo tiempo el Ministerio de Defensa también empezó a analizar la compra de nuevos aviones para la instrucción de los pilotos del Aire. Así, barajó algunos modelos, como el Dassault Dornier Alphajet, de fabricación franco-alemana, y el polaco PZL-130.
“Sistema Integrado de Enseñanza en Vuelo”
En la última publicación del órgano oficial del Ejército del Aire, concretamente la Revista de Aeronáutica y Astronáutica que edita el Ministerio de Defensa, el editorial destaca que el Ejército del Aire se enfrenta a un “importante reto a corto plazo”, el de buscar sustituto para el C-101, empleado en la Academia General del Aire (AGA), para la instrucción del vuelo básico y que está próximo a alcanzar el límite de su ciclo de vida”.
No sólo se plantea el problema, sino también la solución. Se explica que la opción más favorable de las estudiadas, y la que con toda seguridad se adoptará, es la implantación de un “Sistema Integrado de Enseñanza en Vuelo” (ITS, por sus siglas en inglés).
Hasta ahora el C-101 se utiliza en la Fase II o Escuela Básica de la Academia General del Aire. Antes está la Fase I o Escuela Elemental, con aviones ENAR T-35 Pillan. Estas dos fases se realizan en San Javier, y la Fase III o Escuela Avanzada ya se realizan en las bases especializadas en combate, transporte o helicópteros.
Reduce los tiempos y los costes
Ahora el Ejército del Aire, con ese “Sistema Integrado de Enseñanza en Vuelo” pretende disponer de un avión turbopropulsado de altas prestaciones, bien por adquisición directa, bien mediante un contrato de servicios.
Todavía no ha decidido el modelo elegido, pese a que ha estudiado y evaluado distintas opciones, pero la novedad es que se utilizará como sistema de instrucción único tanto para la fase de vuelo elemental como la básica.
De esta forma, el Ejército del Aire espera conseguir varias ventajas: reducir los tiempos de enseñanza, facilitar la transición a los sistemas operativos, y además ahorrar costes de operación. Al haber un solo avión, los alumnos experimentarán menores saltos tecnológicos al ir superando fases en su instrucción como pilotos.
En 2021 tendrán que estar listos
Esta opción se habrá de tomar en los próximos años, ya que como se ha dicho, el ciclo de vida de los C-101 se está agotando. Aunque se les han hecho arreglos a los aviones para extender ese plazo, el Ejército del Aire contempla 2021/2022 como el curso el que los aviones sustitutos deberán estar ya operativos en la Academia General del Aire, para realizar ahí la transición de los C-101 que se despiden a los nuevos modelos.
Además de los aviones que se compren o alquilen, el “Sistema Integrado de Enseñanza en Vuelo” incluiría “un segmento terrestre con un entrenador de salida de emergencia en tierra, simuladores de cabina para entrenamiento de procedimientos, simuladores de vuelo conectados en red y un sistema integrado de enseñanza asistido por ordenador”.
Esta opción soluciona la ausencia de los C-101 en las fases elemental y básica. Para la fase avanzada, en la que los pilotos se especializan en aviones de caza, transporte, helicópteros o drones, ya se están estudiando diferentes alternativas. La más urgente es la de la Escuela de Reactores de Talavera la Real, en Badajoz, donde se forman los pilotos de caza y ataque: los aviones F-5 de instrucción también necesitarán ser sustituidos a corto-medio plazo, como los C-101, en su caso en torno a 2025.