Desde que Escobar creara Zipi y Zape, en casi todos sus cómics y viñetas, aparece “el vale” para la tan ansiada bicicleta de los gemelos. Una forma de evitar cumplir íntegramente la palabra dada, que Don Pantuflo Zapatilla se niega a regalar entera, y usaba el método para contentar poco a poco las expectativas de los dos revoltosos hermanos. No es lo mismo prometer humo que comprometer una parte. Desde luego que la bicicleta nunca llegaba, pero al menos la iban montando poco a poco.
El AVE de Almería ni siquiera cumplía el ser una obra a plazos, sino que de un proyecto inicial, se pasó a un incumplimiento total de las promesas que se hacían en cada cita electoral, hecho que llevó a que la ciudadanía almeriense se reuniera en torno a la Mesa del Ferrocarril, para reivindicar el AVE, entre otras mejoras. El agravio comparativo con otras zonas de España, el desarrollo del Corredor Mediterráneo, y sobre todo el no cumplir la palabra, cansó a la ciudadanía.
Que fue una apuesta de Zapatero en una época de vacas gordas y que se paralizó porque se rompió una situación irreal, no es descubrir la panacea. Que por el “quelonio a proteger” se paralice una obra desde la Junta de Andalucía y se enfrenten dos administraciones, a la espera de informes y más informes, no se lo cree ya nadie como justificación. Que existan unos túneles llamados “de la vergüenza” o que anden reclamando desde la UE que hay que finalizar el corredor Mediterráneo, son dos realidades. Tantas justificaciones y excusas para hacerlo y para paralizarlo, que muchas voces ya no creen muchos en Almería que el AVE llegue nunca, o al menos en los próximos 20 años.
El mayor truco de magia se hacía en los Presupuestos Generales del Estado, en el que ya tradicionalmente, el caramelo del AVE almeriense, siempre aparecía con cantidades que no se ejecutaban en Almería, quedando el debate en una eterna promesa electoral incumplida entre PP y PSOE, o como arma arrojadiza. Aparecer la partida para ejecutarlo, aparecía, pero no se ejecutaba. La mayor causa de no poder exigir la promesa es porque la partida no se territorializaba, dando pie a que dicha partida pudiera trasladarse a otro sitio, como una promesa en la recámara que pudiera transmutarse allí donde más falta hiciera, siempre existe una excusa. Como toda arte escénica de prestidigitador, se ha usado maniobras para dilatar los tiempos y distraer con artificios, y así el público no se da cuenta del truco.
Por tanto ni PP, ni PSOE se han tomado este tema en serio nunca en Almería, y claramente lo han usado como promesa y arma electoral en las últimas consultas electorales. Con la aparición de Podemos y Ciudadanos (CS) en el panorama político, el tema del AVE entraba en sus agendas. Desde Podemos llegando a decir que no era necesario en un principio y corrigiendo este mensaje ante el clamor de la opinión pública almeriense. Desde CS con no menos controversias, debido a las declaraciones de Luis Garicano, su gurú económico, en cuanto a estas infraestructuras, pero que en la provincia siempre han defendido.
El AVE es un tema controvertido por el derroche de vías y de promesas incumplidas, de obras medio terminadas, de adjudicaciones bajo sospecha, y no es barato hacerlo. Una promesa de conecta rápido los destinos, que hace que ir de un sitio a otro en España sea cómodo y rápido, aunque no barato, pero que crea expectativas de un mejor transporte, tanto de personas como de mercancías. Una promesa que siempre se enseña e incumple, oculta, muestra y esconde, a razón de las necesidades electorales del que la maneja.
La Mesa del Ferrocarril es la consecuencia a tantos desmanes electoralistas, y poco hay que decir de ella que los almerienses no conozcan, y menos a los políticos. Activa y reivindicativa, este mes de mayo y junio prometen nuevas movilizaciones. Pues es cierto que la sociedad civil almeriense se ha cansado de que les tomen el pelo con las infraestructuras ferroviarias y ya no se creen nada aunque lo aguante el papel. No sólo es el AVE. La conexión con Madrid o la conexión con Granada, también son dos de sus exigencias para que Almería deje de ser una de las provincias peor conectadas de España. Aún teniendo una industria agrícola potente, una industria turística que debe crecer, y siendo la necesaria conexión por el Este de Andalucía con Europa. En sus reclamaciones justificadas, la necesidad de ejecutar las obras necesarias se hace imperiosa para que la región entera pueda desarrollarse aún más, no sólo Almería, que le urge.
Este lunes CS presentó en rueda de prensa su idea de logro para el AVE almeriense, vía negociación de los PGE. No es gran cosa si se mira en cuanto a cantidad, que se estima para el AVE en dos millones sólo, pero al menos ha doblado lo que PP ha puesto encima de la mesa en los PGE, y conseguido plantear más que PSOE o Podemos. Lo curioso no es la cantidad, sino cómo lo han negociado, pues lo han territorializado para Almería. Es decir, no va a poder enseñar la mano el Gobierno a los almerienses, hacer dos malabares para despistar y que desaparezcan. Cierto que no es mucho, pero es algo, “Un Vale para el AVE”.
Pero más importante que el “El Vale”, es otra de las propuestas que llevan en la enmienda y que han explicado en la rueda de prensa: la Oficina Nacional de Evaluación (ONE) en infraestructuras y para el ferrocarril, que acompaña a la enmienda. Esta oficina se quiere crear para quitar las promesas electorales en materias de infraestructuras, y aplicar la planificación de las mismas, allí donde tienen una mayor repercusión económica y necesidad. En caso de que la enmienda salga adelante, “El Vale” es lo de menos, porque la conexión AVE Almería Murcia, tiene muchos visos de que por fin se lleve a cabo, pues es una infraestructura que desde la UE están reclamando como necesaria para la economía y la conectividad del territorio. Por otro lado, abre la posibilidad de que cuando se diga que se va a dotar de recursos dicha obra, se ejecute como partida finalista en los PGE. Y si se suma la promesa que hace CS de aumento presupuestario para el AVE en los próximos PGE de 2018 bajo esta fórmula, que se negociarán después del verano, junto con la ONE y dotar de presupuesto la mejora de los otros dos ferrocarriles, quizás por fin se pueda comenzar a ver el camino al final del túnel, y no tapiado como estaba. La Mesa del Ferrocarril tendrá mucho que decir, y bien harán en CS en escucharlos, aunque por las declaraciones de la rueda de prensa, parece que son los únicos que han escuchado, aunque sólo traigan “El Vale”.
No es poco si se consigue que esta enmienda de CS prospere, ya que se descubrió el truco que usaban PP y PSOE, y sin truco ya no hay engaño. Lo importante es que se vean realidades, aunque sea a plazos.