Habló el dueño del Atlético de Madrid y dejó claro el futuro que le espera al equipo en el tema deportivo. Nada de grandes fichajes. Nada de grandes cambios. Nada de nada y luego la prensa mamadora del régimen, más unos cuantos neoatléticos, dirá que Diego Pablo Simeone tiene ganar hasta el Gamper –si se jugase-. En la moqueta del palco del Metropolitano no esperan ganar algo –lo que caiga bienvenido sea-, sino simplemente que el equipo obtenga clasificación para la Champions y que la rueda de la fortuna siga funcionando sin más. Eso sí, esperando el milagro de cada año en el terreno de juego con los fichajes que se hacen y poco se harán. A cada buen jugador que se va llega otro que es como un huevo Kinder que no sabes qué tiene dentro. Eso cuando no es un rodillas raras que diría el gran @loloutlaw.
Tres o cuatro retoques mediante un gasto de sólo el 25% de lo que se ingrese porque bla bla bla (pongan aquí la excusa preferida de Miguel Ángel Gil). Lo que quiere decir que si se vendiese por 100 millones sólo se gastarían unos 25 millones. Por poner un ejemplo irreal, si alguien pagase esos cien millones por Diego Costa sólo se podría fichar otro delantero por 25 millones. Con esa cantidad, por mucho que hayan bajado los precios por el coronavirus, fichas un jubilado o un tipo de la liga bielorrusa con apellido sin vocales. Por una vez ha sido sincero, todo hay que decirlo, y ha expresado que los fichajes serán random o trueques raros. Como el que la prensa madridista comenta sobre un tal Allan que se quiere cambiar por Arias y el “hijo del viento” Herrera. Un rodillas raras por dos rodillas raras… si cuela.
Así llevan años haciendo el truco del tocomocho. Siempre con la cuenta de resultados a favor, gastando menos que el Cardiff y siempre con ciertos agentes (especialmente Mendes, quien cuela sus trapicheos) y de ciertas ligas y/o equipos. No se les verá ir a por Müller del Bayern, no. Van a por Moller del Benfica. Da igual que Simeone quiera a este o aquel, que Berta crea haber descubierto una perla en la liga ucraniana, se comprará donde se ha dicho que se compra y a quien se compra. Un negocio donde todo gira en torno a una especie de estafa piramidal donde, como el caso negritos, se paga más por un desconocido que por un jugador contrastado. Suerte habrá si no llegan equipos con pasta en el bolsillo para fichar a Thomas u Oblak. Más que nada porque no se gastarían ni un euro de lo ingresado, pero habrá que ganar todo.
El problema viene porque como se fichan ciertos jugadores de esos que los maldinis del mundo dicen haber visto jugar como Maradona, como se fichan jugadores que eran del Real Madrid o los pretendía, y por tanto estaban sobrevalorados desde el principio, se piensa que la plantilla es mucho mejor. Matallanas así lo cree cada año. Igual porque le invitan a comer los del palco y en el palco, porque cualquiera que haya visto un poco de fútbol sabe que algunos jugadores de hoy no son mejores que algunos suplentes del ayer.
Mucho rumor respecto a fichajes, algo que servirá para llenar espacios como los de la gente de Radio Neptuno, pero en todos ellos, fíjense, no se habla nada de Ivan Šaponjić. No se extrañen que lo acaben vendiendo como el verdadero refuerzo estival –igual lo hubiesen intentado con Lemar pero Simeone ha pedido que se vaya-. Ya lo han hecho en el pasado con Costa, al que intentarán colocar este verano completando el círculo virtuoso del gilismo. Se va Costa y se apuesta todo a Šaponjić. De primero de cerezismo-gilismo. Y querrán que se gane la liga con Morata-Joao… No se extrañen que acabe jugando Borja Garcés y lo vendan como el gran descubrimiento o fichaje invernal. A un paso de estar como el Valencia de Lim pero la prensa nacional-madridista haciendo la ola al tándem Gil-Cerezo –porque saben que así no son competencia para su equipo-. Los que hablan del sueldo de Simeone no valoran que trabaja con estos asaltacarros, poco le pagan.
Y usted, ¿es acaso de la prensa mamadora del cholismo? Porque lo parece. O sea, que según usted, tenemos una plantilla de medio pelo, y gracias al entrenador no descendemos a segunda… Vaya, y algunos que pensamos que tenemos plantilla de sobra para clasificarnos cada año para la Champions, y que no sea un logro excepcional conseguirlo. Pues mire, no sé si me considerará neoatlético (llevo más de 40 años siguiendo apasionadamente al Atlético), no exijo que se gane todo, no tiene sentido, pero sí que se juegue un poco al fútbol. Saludos.