La guerra de Siria entra en un nuevo estado tras la confirmación del Pentágono de que el Ejército de los Estados Unidos ha derribado a un avión sirio que había bombardeado a las fuerzas apoyadas por los norteamericanos. Es la primera vez que los EE.UU. derriban a un aparato sirio, tal y como ha confirmado el portavoz del Pentágono Jeff Davis.
La sede de la coalición en Irak confirmó que un F18 Hornet había derribado a un Su22 sirio después de que éste lanzara bombas contra las fuerzas apoyadas por los estadounidenses. El derribo se produjo cerca de la ciudad de Tabqa, ciudad situada en un área donde se están produciendo combates de cara al asalto final al feudo del Estado Islámico en Raqqa. Según el Pentágono, el ataque se produjo en «defensa propia», tanto de sus pilotos como de las fuerzas aliadas y que no buscan la confrontación con el gobierno sirio.
Para el Pentágono el enemigo es el Estado Islámico tanto en Irak como en Siria, no el gobierno de Bashar al Assad ni Rusia, pero que se enfrentará a cualquiera que ataque a las fuerzas a las que apoya.