La eurodiputada del PSPV, Inmaculada Rodríguez-Piñero ha exigido a la Comisión Europea que adopte con carácter urgente “medidas concretas para acabar con la disparidad de los controles europeos en las aduanas” tras la elaboración y aprobación del informe sobre “la evaluación de los aspectos externos del funcionamiento y la gestión de los servicios de aduanas como herramienta para facilitar el comercio y luchar contra el comercio ilícito”, del que la propia Rodríguez-Piñero ha sido ponente como representante del Grupo Socialista (S&D) y que tiene como objetivo “sentar las bases y proponer medidas concretas para conseguir la colaboración de todos los estados miembros en la adecuada armonización aduanera”
De esta forma, la dirigente socialista defendió durante su intervención que “la competencia desleal a la que tienen que hacer frente los puertos de la Comunitat por los controles menores, inspecciones diferentes y sanciones dispares que establecen los puertos del norte de Europa tiene que acabar” ya que, como aseguró “está perjudicando notablemente a los productores españoles y valencianos, que ven cómo los productos procedentes de terceros países que no cumplen con los mínimos exigidos sí que son aceptados en áreas donde las inspecciones son más benévolas”. “La unión aduanera fue uno de nuestros principales logros como UE, pero desde luego no está finalizada y sigue con graves disfunciones a las que tenemos que poner solución”, insistió durante su discurso.
De hecho, para Inmaculada Rodríguez-Piñero “es inadmisible que por determinados puertos puedan entrar mercancías que no cumplen con los estándares medioambientales o con nuestras normas fitosanitarias por inspecciones poco rigurosas, como en el caso de las naranjas sudafricanas contaminadas con la mancha negra que tanto daño podrían hacer a nuestros cítricos”. Por todo ello, y entre otras medidas, desde el PSPV se ha propuesto “establecer indicadores para evaluar las prácticas aduaneras y armonizar los criterios de inspección, las sanciones y el número de controles en las aduanas”, así como “crear un organismo de control europeo que garantice un trato armonizado en los puertos de entrada de la Unión”.
“Estas divergencias están permitiendo la competencia desleal con nuestra industria y entre puertos al penalizar a aquellos con mayores controles, lo que provoca una grave distorsión en el mercado, desviación del tráfico comercial y un impacto medioambiental negativo” ha sentenciado la eurodiputada antes de recordar que “corregir esta grave situación sólo depende de la voluntad política de defender nuestra Unión, puesto que el comercio ilícito contribuye también a la financiación de organizaciones delictivas dedicadas al terrorismo, el blanqueo de capitales, el tráfico de drogas o la falsificación de medicamentos”.