Es escuchar sus palabras (“One, two, three..”) acompañadas del riff de guitarra de entrada para que casi toda aquella persona que ha escuchado música más allá de lo que hoy llaman música para saber que comienza Sweet Home Alabama (si escuchan Miña Terra Galega de Siniestro Total también vale). Pues esas palabras y ese riff de guitarra son del guitarrista que acaba de fallecer, Ed King. A la edad de 68 años y víctima de un cáncer, aunque nunca tuvo una excelente salud como atestiguan sus infartos y el consiguiente trasplante de corazón que tuvo en 2011. Una muerte más en la terrible historia de Lynyrd Skynyrd de cuyos miembros originales sólo sobreviven dos de seis. Uno de ellos falleció en el trágico accidente de avión que sufrieron (Ronnie Van Zant), otro posteriormente por una neumonía (Allen Colins) y dos no hace mucho por infartos (Billy Powell y Leon Wilkeson).
Californiano originario de Glendale , comenzó su carrera artística en el grupo de rock psicodélico Strawberry Alarm Clock cuyo mayor éxito, que logró situarse en el número 1 de la lista Billboard, fue co-escrito por King, Incense and Peppermints. Con este grupo estuvo de gira hasta que el grupo se separó. Tras un tiempo sin grupo, fue aceptado en Lynyrd Skynyrd a los que conocía de haber compartido cartel en algún concierto que otro a finales de los 1960s. En 1972 tomó el bajo, pues Wilkeson dejó temporalmente el grupo. Pero con la vuelta del bajista y en puertas de grabar su primer álbum King pasó a tocar la guitarra, formando así el triunvirato que tanta fama daría al grupo y que sería inspiración para muchos grupos de rock sureño.
El primer LP de Lynyrd Skynyrd resultó un gran éxito, revitalizando el rock frente a lo apabullante del rock sinfónico y la dureza del Hard Rock, con ese toque del sur de los Estados Unidos (mezcla de country, folk, blues y rock) que se ha catalogado como southern rock. Pronounced Leh-Nerd Skin-Nerd les abrió las puertas de la música (tanto como para encandilar a Neil Young, verdadero fan del grupo), pero sería el segundo LP Second Helping el que les elevó a la categoría de estrellas en el firmamento del rock. La citada Sweet Home Alabama, Workin’ for MCA (también co-escrita por King), The Needle and the Spoon o Don’t Ask me no Questions eran escuchadas en la mayoría de radioestaciones y más en el sur de los Estados Unidos. El siguiente LP, el último en el que participó King, Nuthin’ Fancy tuvo un poco menos de éxito, no por ello dejó de ser disco de platino, aunque King colaboró en dos de sus canciones más conocidas Saturday Night Special o Whiskey Rock-a-Roller.
Agotado de giras (alguien que tenía cierto sobrepeso), de excesos varios y peleas, a puñetazos a veces, entre los integrantes del grupo (son históricas las batallas que se cuentan de las peleas de Lynyrd Skynyrd cuando les hacían frente, especialmente una con Humple Pie) abandona el grupo durante la gira del último LP. No sería reemplazado hasta unos cuantos meses después tras probar al hermano de la corista (Cassie Gaines) de las Honkettes, Steve Gaines. Los miembros que quedaban del grupo grabaron Gimme Back my Bullets que sólo consiguió ser disco de oro, al contrario que los LP anteriores. Posteriormente, en 1986 King, Gary Rossington, Leon Wilkeson, Artymus Pyle (batería que reemplazó a Bob Burns después de publicarse el segundo LP) y Powell reunirían al grupo para una serie de conciertos y discos que tuvieron cierto éxito en EEUU. Acompañados a la voz por Johnny Van Zant, hermano del fallecido vocalista. Pero sus problemas de salud le obligarían a dejar el grupo nuevamente en 1996.
King, junto a Collins y Rossington, crearon un sonido de tres guitarras que a día de hoy no ha podido ser igualado por muchas bandas que les han sucedido y se han inspirado en ellos. La mezcla de riffs, punteos y acordes, trabajados hasta la saciedad por mandato del “dictador” Van Zant, generaron un sonido inconfundible que marca un hito en la historia del rock. Por tanto se ha ido alguien que ha dejado huella, aunque las personas no sepan ni quién es, con un sonido, con una forma de entender el rock, con unas composiciones que eran mezcla de una cultura popular que hoy, desgraciadamente, la industria está matando. Su compañero en Lynyrd Skynyrd, Gary Rossington ha querido acordarse de él en esta despedida con unas sentidas palabras: “Ed era nuestro hermano y una gran compositor y guitarrista. Sé que él se habrá reunido con el resto de los chicos en el Cielo del Rock and Roll. Nuestros pensamientos y oraciones están con su familia”. Sin duda hoy en ese cielo del rock los Lynyrd podrán tocar nuevamente Free Bird.