Lleva la presidenta del partido conservador en la Comunitat, Isabel Bonig, unas semanas acusando al Gobierno del Botánico de todas las tropelías posibles y de llevar a los valencianos y valencianas hacia la ruina. Desde uno de los partidos del gobierno de coalición no han podido aguantar más esta ristra de declaraciones y han salido a contarle a la popular de dónde viene y a quién representa. El Síndic (portavoz) de Compromís en Les Corts ha sido claro y contundente.
Fran Ferri ha solicitado al Partido Popular que “deje de intentar tapar su corrupción detrás de banderas gigantes y pónganse a trabajar para devolver el dinero saqueado a las valencianas y valencianos colaborando con la justicia para recuperar hasta el último céntimo despilfarrado por su gobierno”.
En la coalición Compromís entienden que la justicia va avanzando poco a poco y desde la presidencia del partido conservador intentan tapar los casos de corrupción y de despilfarro. Ferri ha afirmado que “es una gran noticia el avance judicial del caso Valmor. Es un caso que demuestra el modus operandi del Partido Popular: grandes eventos sin retorno social, empresas fantasmas, falsificación de firmas y contratos millonarios a empresas que, según distintos sumarios judiciales, se dedicaban sobre a dirigentes del PP y financiar ilegalmente las campañas electorales de ese partido”.
No sólo denuncian en Compromís, van más allá: “Desde Compromís creemos que es fundamental que, además de asumir las responsabilidades penales, los dirigentes del PP deberían asumir su responsabilidad patrimonial por regalar a cuatro amiguetes el dinero de los valencianos y las valencianas”. Esto fue lo que les movió a denuncia en 2013 la compra de Valmor al Tribunal de Cuentas, “porque queremos que vuelva el dinero y que se destine a mejorar la vida de la gente: a la educación, a Sanidad, a Dependencia y a políticas de empleo”.
También ha querido Ferri hacer ver a la presidenta del PP sobre cuál hubiera sido su función principal: “Bonig tenía la opción de regenerar su partido pero ha preferido reivindicar el gobierno de Francisco Camps con su modelo de gestión. Los valencianos y valencianas no quieren volver al pasado de saqueo, corrupción e incompetencia. No existe bandera tan grande como para tapar las vergüenzas de un partido que llevó a la ruina y el descrédito a nuestra tierra”.