El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha lamentado que el Gobierno central siga dando «la espalda a los valencianos con el problema de la deuda acumulada, que exige una quita para hacer justicia con el pasado». Soler se ha pronunciado así tras conocer las cifras de la evolución de la deuda de las comunidades autónomas que publicado hoy el Banco de España a través de su página web. Según éstas, la deuda de la Comunitat Valenciana se sitúa, a 30 de junio de 2017, en 44.975 millones de euros, lo que supone el 41,9% del PIB, el mayor porcentaje de las autonomías, una posición que mantiene desde hace prácticamente dos décadas.
«El endeudamiento valenciano ha crecido en el pasado por la crónica infrafinanciación de la Comunitat Valenciana, reconocida hoy por todos los expertos, incluidos los del Ministerio de Hacienda, así como por los excesos y despilfarros de anteriores ejecutivos que tenemos todos en mente. De ésta última deuda, generada por unos gobernantes elegidos democráticamente, nos hacemos cargo todos los valencianos y este Consell trabaja para que sean sus responsables los que apechuguen con ella. Pero la otra, la de la insuficiencia de recursos que padece la Comunitat Valenciana, de ninguna manera», ha aseverado el conseller.
Soler ha recalcado que el Gobierno central «ha de dar solución al problema de la infrafinanciación, bien aprobando un nuevo modelo como le han facilitado los expertos que sustituya al actual, caducado en 2014, o bien con una aportación extraordinaria que ponga números a la discriminación que admiten los técnicos del ministerio».
«Además es necesaria una solución a la deuda histórica, que habría de venir de una quita equivalente al importe de los déficits de financiación acumulados. En caso contrario, sería evidente que el Gobierno penaliza a los valencianos a sabiendas de la injusticia de lo que está haciendo».
2.589 millones de “pufo” de la gestión del PP
Con relación a las cifras de deuda a junio de este año, el conseller ha señalado hoy que «el 52,7% de la deuda de la Comunitat Valenciana generada durante esta legislatura corresponde a operaciones o decisiones atribuibles al anterior gobierno». En concreto, un total de 2.589 de los 4.911 millones en que ha crecido la deuda entre junio de 2015 y junio pasado se han destinado a cubrir gastos realizados durante la anterior legislatura o responden a decisiones tomadas por el anterior Consell.
En esos 2.589 millones, hay 1.468 que corresponden a las desviaciones de déficit de ejercicios anteriores a 2015, que se ingresaron en diciembre de ese año mediante un FLA extraordinario. Solo este concepto representa prácticamente el 30% del total de lo que ha crecido la deuda durante esta legislatura. Además, se incluyen los 200 millones que hubo que aportar para rescatar a la Sociedad de Garantía Recíproca de la Comunitat Valenciana tras la gestión del anterior Consell.
También figuran otros 107 millones para cubrir los pagos de obras realizadas mediante el método alemán entre los años 2005 y 2008. Finalmente, se computan 814 millones correspondientes a la mitad de la desviación del déficit de 2015, toda vez que ese año fue gestionado en el primer semestre por el anterior Consell y en el segundo semestre, por el actual. La suma de estos conceptos se eleva a los citados 2.589 millones de euros de deuda, generada en su totalidad por el anterior gobierno. Los restantes 2.322 millones, el 47,3%, hasta sumar los 4.911 millones de incremento en la legislatura, son imputables al actual gobierno.
Durante el primer semestre del año, la deuda de la Comunitat Valenciana ha crecido en 312 millones de euros, lo que supone un incremento porcentual del 0,70%. Hay que destacar que la Comunitat es la segunda autonomía en la que menos ha crecido en términos relativos el endeudamiento durante este periodo (solo por detrás de Castilla y Léon, donde ha aumentado un 0,55%) y, además, el incremento registrado en esta comunidad es muy inferior al del conjunto de las autonomías, que ha sido del 3,22%.
Los 312 millones de incremento del endeudamiento valenciano durante el primer semestre de 2017 se deben básicamente al FLA ordinario de 2017, atendiendo solo a la parte destinada a financiar las liquidaciones negativas del sistema de financiación o para financiar el déficit del año, así como a 71 millones del FLA extraordinario de 2016. En el segundo trimestre se ha regularizado el descenso de la deuda que se registró en el primer trimestre y que era irreal. Aquel descenso se debió al retraso del Gobierno central en activar el FLA extraordinario, lo que obligó a atender vencimientos con cargo a un anticipo de la liquidación de 2015. En el segundo semestre se ha regularizado esta operación a través del FLA Vencimientos, consolidando la cifra de un aumento de la deuda de 312 millones en lo que va de año.
Tras conocer los datos publicados por el Banco de España, Soler ha afirmado que «mientras no cambie el actual modelo de financiación, la Generalitat incurrirá en déficit, porque no estamos dispuestos a asumir ningún recorte. Los valencianos se merecen disfrutar de unos servicios básicos similares a los del resto de los españoles y si para ello no contamos con los recursos suficientes provenientes del sistema de financiación, tendremos que incurrir en déficit».
«Todos los expertos han certificado que los ingresos que recibe la Comunitat Valenciana nos sitúan a la cola, entre las comunidades peor financiadas, pero sin embargo nuestro nivel de gasto está por debajo de la media. Estamos atendiendo, en el marco de nuestras competencias, los recursos que requieren nuestro servicios básicos fundamentales», ha concluido el conseller.
