Quinta victoria consecutiva del Real Zaragoza, quinto triunfo encadenado también en “La Romareda” desde que el equipo de Natxo González iniciase un sobresaliente racha en Enero, esta vez por 3-1 ante el Lorca FC, el penúltimo clasificado y prácticamente desahuciado de la categoría. El equipo aragonés cumplió su objetivo sin alharacas en una sesión matinal en “La Romareda” que pudo y debió concluir con un marcador mucho más abultado de no haber mediado cierto conformismo en el modo de acometer muchas fases del choque por parte de los zaragocistas, mucho mejores en todas las facetas del juego a su limitado adversario.
Apabullante superioridad la que mostró el Real Zaragoza desde el mismo inicio del partido sobre un Lorca paupérrimo en su aplicación futbolística. El primer tiempo fue para que el marcador reflejase ya una goleada monumental, de cinco goles hacia arriba. Pero los locales solo acertaron en dos de sus múltiples ocasiones ante el marco de Dorronsoro, ex zaragocista que nada pudo hacer más que sufrir los constantes ataques francos de los blanquillos ante la indolencia de sus compañeros.
Después de que en los primeros 10 minutos los locales le tomaran el pulso al perfil del duelo, arrancó la catarata de oportunidades ante el marco lorquino. Hasta cuatro ‘mano a mano’ generó el Zaragoza de manera consecutiva entre el 16 y el 21, un aluvión que comenzó con dos fallos en la misma jugada: primero Borja Iglesias estrelló la pelota en la mano de Dorronsoro cuando “La Romareda” ya cantaba el tanto y, en la continuación de la acción, Papunashvili cruzó en demasía su remate a placer ante el arquero visitante, fuera por un palmo junto al palo derecho. No hubo espacio para la desesperación porque, de inmediato, de nuevo Papunashvili se quedó solo ante el portero tras un pase al hueco de Eguaras. Esta vez sí, el georgiano, sustituto del sancionado Pombo, regateó a Dorronsoro con un amago y estrenó el tanteador a puerta vacía.
Cuando aún se celebraba la ventaja y la afición hervía de alegría, Iglesias insistió en quedarse a solas con el guardameta lorquino tras una contra perfecta de Febas. Y esta vez el gallego atinó a superar por bajo su salida para, en el minuto 20, hacer el 2-0 y volcar decisivamente la balanza del lado blanquillo. El Lorca se hundió en su incapacidad y las llegadas zaragocistas al área rival fueron siempre con aroma de éxito.
Otra vez más, Borja Iglesias, estuvo a centímetros de firmar el tercer tanto, pero su disparo cruzado en el 22, tras un quiebro a uno de los tres centrales forasteros, rozó el poste por fuera. Y así fue hasta el descanso la trama del juego. Papu se mostró precipitado e individualista, como también el propio Borja, en un par de ataques francos. Eso evitó que el marcador creciera como merecía la diferencia entre unos y otros sobre el césped.
Los lorquinos solo tuvieron un breve espacio de inspiración ofensiva, con un disparo raso de Noguera en el área en el minuto 28 que paró bien Cristian Álvarez y, tres más tarde, un cabezazo de Nasufi a la salida de un córner que se marchó fuera por poco.
Eguaras manejó el timón a su antojo, bien secundado por Zapater y con un Guti algo apagado en esta primera mitad. Febas hilvanó constantemente con los dos puntas. Benito y Lasure, los laterales, fueron por momentos dos extremos puros. Atrás, Mikel González captó todos los balones al corte, con Perone de escudero. Resultó, a ciencia cierta, una tarea sencilla superar a un Lorca muy disminuido, con síntomas de asfixia en su aventura en Segunda División a estas alturas de marzo. Así que, en esta ocasión, el descanso llegó en absoluta calma. Nadie dudaba de que los tres puntos estaban bien amarrados, tanto por la marcha del marcador, como por las hechuras del Real Zaragoza y el Lorca en el manejo de la pelota.
Pero el Real Zaragoza se empeñó en complicarse la vida. Y salió totalmente dormido del vestuario. El Lorca, tras su penosa primera mitad, sacó fuerzas de flaqueza y comenzó dominando el juego y metiendo atrás a los de Natxo. Y en el 55 llegó el susto. Noguera anotó el 2-1 a puerta vacía tras un centro de volea de Peña en pleno sueño de todo el bloque blanquillo. Y la afición empezó a oler a chamusquina y llegó a soltar varias ráfagas de pitos a modo de despertador.
Perone, de cabeza, tras cuatro minutos de dudas generalizadas, devolvió la calma al escenario. El central, en la segunda acción tras un córner, remató picado un centro de Eguaras para rubricar el 3-1 en su primer tanto como zaragocista. Y las tribunas, ansiosas de fiesta, comenzaron a hacer la ola mexicana. Era un día para disfrutar, para golear, para mejorar el ‘golaverage’ de modo sensible, y el equipo debía creérselo para poder consumarlo.
No sucedió así porque la inspiración en las jugadas de ataque de los jugadores del Real Zaragoza no fue su mejor virtud en la matinal de este domingo. Hubo demasiada imprecisión en el último pase y eso impidió que el tanteo fuese creciendo al compás de las jugadas de peligro que iban creando. Febas, en un cabezazo que rozó el larguero tuvo la más clara. Antes, Raúl Guti se trastabilló en un contragolpe en solitario que no acabó resolviendo en disparo propio ni en asistencia al mismo Febas, que le acompañaba solo. Natxo le dio un cuarto de hora a Vinicius en una mañana plácida para ver si el brasileño lograba estrenarse. El árbitro expulsó al central lorquino Bicoro a falta de 14 minutos por doble amarilla y aún allanó más el camino del gol para los locales. Pero hubo demasiado conformismo en las filas zaragozanas. Seguramente el principal déficit del equipo en este desigual choque contra el Lorca.
Natxo siguió dando cuerda a los menos habituales y puso en juego a Oyarzun y Ángel Martínez en la recta final. Gestos positivos para continuar manteniendo la piña del grupo. Y así se llegó al final, con un disparo de Raúl Guti desde la frontal del área que tocó el larguero en el 89, como colofón a una abúlica segunda mitad que dejó un paladar extraño entre la afición aragonesa, que esperaba un resultado más contundente visto el potencial de los lorquinos en su puesta en escena. El triunfo era lo esencial, crucial para seguir la escalada hacia la zona noble de la clasificación, pero pudo ser mucho más convincente y rentable en el balance goleador final del Real Zaragoza.
Ficha Técnica
Real Zaragoza: Cristian Álvarez; Benito, Mikel González, Perone, Lasure (Ángel Martínez, 88); Eguaras (Oyarzun, 81), Zapater, Raúl Guti, Febas; Papunashvili y Borja Iglesias (Vinícius, 75).
Lorca FC: Dorronsoro; Fede Vega, Bicoro, Digard (Fran Cruz, 74), Nasuti (Ojeda, 65), Peña; Gomelt, Tropi; Noguera, Javi Muñoz (Brown, 65); y Villalibre.
Árbitro: Moreno Aragón (Comité Madrileño). Expulsó por doble amarilla a Bicoro (64 y 76). No hubo más amonestaciones.
Goles: 1-0, min. 18: Papunashvili. 2-0, min. 20: Borja Iglesias. 2-1, min. 55: Noguera. 3-1, min. 59: Perone.
Incidencias: Mañana nublada en Zaragoza, con temperatura agradable, 13 grados. El césped de “La Romareda” presentó un buen aspecto. En las gradas, la mejor entrada de la temporada, cercana al lleno, alrededor de 30.000 espectadores. Asistió al partido en el palco el ex zaragocista Vallejo, ahora jugador del Real Madrid.