La vicepresidenta de la Generalitat Valenciana y consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha apostado por considerar las migraciones como una «buena inversión de futuro» que resulta favorable para el desarrollo económico y un factor contra el envejecimiento demográfico, y ha añadido «el valor intrínseco positivo» que ha conllevado históricamente la emigración en la conformación de las culturas y los pueblos.
Así se ha manifestado la vicepresidenta de la Generalitat en la inauguración de la conferencia europea ‘Migración e Inclusión en la Unión Europea: las experiencias y perspectivas europeas y regionales’, organizada por la Vicepresidencia y Consejería de Igualdad y Políticas Inclusivas y la Dirección General de Relaciones con la Unión Europea, en colaboración con la oficina valenciana del programa europeo de cooperación entre regiones Interact y la Universitat de València.
El Consell, ha defendido, cree «firmemente que es posible otra política migratoria y así lo está demostrando, no solo con medidas centradas en la inclusión de competencia autonómica, sino abriendo las puertas y acogiendo a aquellas personas a las que se las cerraron en otros estados».
Oltra ha denunciado la «irresponsabilidad» de convertir y utilizar las migraciones como un «arma política» repleta de «xenofobia, racismo y aporofobia», por la vía de «criminalizar de manera generalizada a las personas emigrantes y refugiadas» y de «sembrar y extender entre la población la sospecha, el miedo y el odio hacia ellas».
En este sentido, ha alertado sobre el discurso anti-inmigración, del odio y del miedo basado en «bulos y burdas mentiras», que salpican y socavan «los cimientos democráticos, atentan contra los derechos humanos, contra las libertades civiles y los avances sociales y democráticos sobre los que se ha asentado Europa» y ha apostado por «revertir el mensaje negativo que algunos se empeñan en presentar como verdad absoluta».
En su intervención, ha querido hacer una mención especial a las 35.597 personas refugiadas y migrantes muertas o, más bien, «cuya muerte está documentada entre 1993 y el 30 de septiembre de 2018. ¿Cuántas más habrá que no sepamos?», ha lamentado.
En esta línea, ha deplorado que un mar «símbolo de vida, de recursos y de riqueza, puente que une personas y culturas, espacio de esperanza para mucha gente», sea también «una inmensa fosa común que nos avergüenza», de miles de personas que huyen de sus países, de la guerra, de la violencia, de la persecución, del hambre o de la miseria, buscando en Europa un destino seguro, un refugio, una oportunidad, un futuro, que no encuentran».
Por ello, ha manifestado Mónica Oltra, en las políticas migratorias el único factor que no puede ni debe relegarse a un segundo plano es «el respeto escrupuloso y la defensa a ultranza de los derechos humanos, del derecho internacional, de los convenios y tratados sobre esta materia».
Pero además, la vicepresidenta del Consell ha apostado por considerar las migraciones como una «buena inversión de futuro, favorable para el desarrollo económico y un factor contra el envejecimiento demográfico», y ha añadido el valor «intrínseco positivo» que ha conllevado históricamente la emigración en la conformación de las culturas y los pueblos.
Al respecto, ha asegurado que el actual Consell cree «firmemente que es posible otra política migratoria y así lo está demostrando, no solo con medidas centradas en la inclusión de competencia autonómica, sino abriendo las puertas y acogiendo a aquellas personas a las que se las cerraron en otros Estados».
Así, ha expuesto las principales líneas de actuación del Consell en materia de personas refugiadas y las políticas de inclusión para personas migrantes, porque para Oltra, el respeto a los derechos humanos «nunca debe ser una posibilidad, una opción, sino una obligación que se sustenta en la defensa y garantía de la dignidad humana».
Entre las acciones del gobierno valenciano, la vicepresidenta del Ejecutivo ha destacado la experiencia del Aquarius, en la que la Generalitat, junto con el Ayuntamiento de València y el Gobierno de España, acogió a 629 personas refugiadas.
Una iniciativa que, a su juicio, demuestra la posibilidad de hacer políticas con «enfoques integrales inclusivos y de participación» en busca de «una sociedad más cohesionada», y también demuestra «la solidaridad de todo un pueblo, que se volcó con la colaboración voluntaria y desinteresada de más de 2.300 personas».
«La Generalitat cumplió con la ley, con los principios democráticos y de respeto de los derechos humanos, que han de ser la guía de las políticas migratorias que defendemos», ha asegurado.
Jornadas migración
En las jornadas europeas dirigidas a políticos locales, nacionales y europeos, al tercer sector y a profesionales de la investigación en migración, inclusión y cultura, se analiza entre hoy y mañana la evolución del fenómeno migratorio.
El encuentro europeo debatirá alternativas a las políticas migratorias y de asilo que en la actualidad se están desarrollando y se reflexiona sobre la migración como oportunidad para la inclusión social, sobre el papel de la cultura y la educación en esta misma inclusión, sobre las diversas dimensiones de los fenómenos migratorios y las oportunidades de inclusión que representa para el territorio europeo y valenciano.
La clausura del acto contará con la presencia del secretario autonómico de Igualdad, Alberto Ibáñez, el delegado del Consell para la Unión Europea y la Acción Exterior, Joan Calabuig, y el coordinador de la Oficina Interact Valencia, Tomasz Petrykowski.
En la organización de la conferencia también han colaborado la Federació Valenciana de Municipis i Provincies (FVMP) y la Associació d’Il.lustradors Valencians y el IVAJ con la muestra ‘Refugi Il.lustrat’, dentro del programa cultural de las jornadas.