La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) ha pedido una pena de dieciocho años de cárcel para el coronel Santaella por su presunta participación en una organización de narcotráfico que introdujo varias toneladas de hachís procedente de Marruecos por la costa de Granada. También solicitan 15 años de inhabilitación y multas por un valor de 10 millones de euros. La presunta implicación del coronel se daba por impedir que los alijos fueran incautados por la Guardia Civil a cambio de dinero.
La AUGC está personada en la causa porque se trata de un caso de corrupción en el cuerpo ya que este coronel asumió de manera personal el mando de todas las operaciones antidroga de la provincia de Granada y desvió unidades para favorecer la entrada del hachís a España. Por esta razón acusan al coronel de cometer delitos contra la salud, blanqueo de capitales y cohecho.
Los motivos de la acusación son que el coronel, entonces comandante, controlaba toda la información de las operaciones antidroga porque pasaban por sus manos y movía a las unidades antidroga para favorecer a la organización para la que presuntamente trabajaba, saltándose toda la cadena de mando y sin control por parte de ésta ni de las autoridades judiciales.
Según la Asociación, el enero de 2006 se produjo una conversación entre el coronel Santaella y un informante en la que se acordó la entrada de dos alijos en España por lo que recibiría una cantidad de 240.000 euros en efectivo. Estos cargamentos contenían dos toneladas de hachís y fueron descargados en las playas de Motril. En ese mismo encuentro se acordó también que otro alijo de droga de escasa calidad fuera interceptado como un modo de justificación de las otras dos.
Por su parte, la Fiscalía ha solicitado una pena de 9 años y 3 meses de prisión y el pago de una multa de 6 millones de euros para el coronel Santaella.