El Servicio Valenciano de Empleo y Formación, Labora, está llevando a cabo una serie de actuaciones específicas para incentivar la contratación, la creación de empleo y el mantenimiento de los puestos de trabajo de las mujeres. Así, Labora incentiva con ayudas de 23.940 euros la contratación indefinida de mujeres pertenecientes a los siguientes colectivos: menores de 30 años, desempleadas de larga duración, mayores de 50 años y en situación de riesgo de exclusión social. Asimismo, si la mujer contratada es víctima de la violencia de género, el importe ascenderá a 25.200 euros.
En España, la brecha salarial es del 22,3% y es incluso mayor en determinados colectivos, como el de personas mayores de 45 años, y en los empleos poco cualificados, según el INE. El salario medio de las mujeres es inferior al de los hombres en todas las comunidades autónomas.
Además, las tasas de actividad y empleo son inferiores entre las mujeres, mientras que la tasa de paro es 4 puntos más alta que la de los hombres, según la Encuesta de Población Activa, EPA. «En Labora somos conscientes de esta realidad -ha explicado la directora general de Empleo y Formación, Rocío Briones- y estamos tomando medidas para paliar esta desigualdad».
La brecha salarial
El concepto de brecha salarial de género hace referencia a la diferencia en la retribución recibida entre hombres y mujeres. Entre las causas que explican esta diferencia entre sexos está el hecho de que los hombres generalmente ocupan los puestos directivos o de mayor responsabilidad y desempeñan funciones que suelen ser mejor remuneradas, mientras que los trabajos en los sectores más feminizados tiendan a estar peor pagados.
La última Encuesta Anual de Estructura Salarial (EAES) publicada en 2018, con datos de 2016, exponía que el salario medio anual femenino representó solo el 77,7% del masculino. Por cada euro cobrado por una mujer, un hombre en las mismas circunstancias ingresa 1,29 euros.
La brecha salarial está condicionada por una serie de factores sociales, legales, económicos, y constituye un concepto que va más allá de la premisa igual pago por igual trabajo. «Por cada mujer en un puesto de dirección hay 2,1 hombres, mientras que por cada mujer en un empleo elemental hay 0,8 hombres. Las mujeres también acaparan los empleos temporales y a tiempo parcial, con una tasa de parcialidad 18,8 puntos superior a la de los varones», ha recordado Rocío Briones.
La EPA del 4º trimestre de 2018 también revela que el porcentaje de mujeres con jornada parcial para atender las necesidades familiares del 27,8%, mientras que la de los hombres solo alcanza el 6%. Los datos reflejan que la proyección laboral de las mujeres se estanca en las edades asociadas a la maternidad.
«Todo esto demuestra que los trabajos no remunerados vinculados al ámbito familiar y doméstico siguen recayendo sobre las mujeres. Son las mujeres quienes, generalmente, se ocupan del cuidado de los hijos y de los ancianos y esto influye negativamente en sus perspectivas laborales», ha opinado Briones.
Las medidas de Labora
Entre los principales cometidos de Labora, el Servicio Valenciano de Empleo y Formación, es impulsar políticas para la integración laboral de los colectivos que presentan mayores dificultades de inserción en el mercado de trabajo. La tasa de desempleo entre las mujeres es mayor y las mujeres desempleadas, a pesar de que tienen un nivel formativo más alto que el de los hombres (14% universitarias frente al 9,3% universitarios), tardan más tiempo en encontrar un empleo.
«Por ello, en Labora estamos trabajando para impulsar medidas efectivas para impulsar el empleo de la mujer y acabar con la desigualdad de género en el ámbito laboral», ha expuesto la directora general de Empleo y Formación.
Como de cada 10 contratos laborales firmados por las mujeres valencianas 9 son temporales, el Servicio Valenciano de Empleo da subvenciones a las empresas que contraten de forma indefinida a mujeres desempleadas. Además de los incentivos a la contratación femenina inicial, Labora también otorga ayudas para la conversión a indefinido de contratos temporales de mujeres pertenecientes a colectivos vulnerables. El importe es de 12.600 euros y si la mujer es víctima de violencia machista, a 25.200 euros.
Del mismo modo, el Servicio Valenciano de Empleo subvenciona la contratación en prácticas de: menores de 30 años, personas en situación o riesgo de exclusión social, desempleados de larga duración, mayores de 50 años y personas con diversidad funcional. Si en la persona contratada concurre adicionalmente la condición de mujer el importe ascenderá a 10.710 euros. Si la mujer es víctima de la violencia de género, el importe ascenderá a 11.340 euros.
Por otra parte, se otorgan distintas ayudas para fomentar el emprendimiento y el mantenimiento del trabajo autónomo de las mujeres. La Conselleria de Economía, a través de Labora, ha convocado subvenciones de fomento de empleo dirigidas a las personas desempleadas que quieran iniciar un negocio y la cuantía de estas ayudas se incrementa para las mujeres emprendedoras.
En 2018, Labora -entonces Servef- ofreció por primera vez ayudas para que las mujeres autónomas embarazadas o en trámites de adopción contrataran a personas desempleadas a las cuales transferir sus conocimientos antes de su baja maternal.
Este mismo mes, se han vuelto a convocar las subvenciones para el ejercicio de 2019. Las mujeres embarazadas autónomas o en proceso adopción que contraten a otra persona para mantener la actividad durante baja maternal pueden pedir las siguientes ayudas: 1.500 euros para contratos 3 meses (o 2.000 euros si se contrata a otra mujer) y 3.500 euros para contratos de al menos 6 meses (4.000 si la persona contratada es otra mujer). Las mujeres que deseen solicitar las ayudas, pueden presentar su solicitud hasta el 1 de octubre.
Rocío Briones, ha concluido que, «con estas ayudas, el Servicio Valenciano de Empleo y el Consell responden a la reivindicación de las valencianas para mejorar la situación laboral de la mujer». El objetivo es acabar con la brecha salarial y conseguir la igualdad real de género.