Mes de junio de 2017 y sin Presupuestos Municipales a la vista en el Ayuntamiento de Sant Joan d’Alacant. Nada nuevo bajo el mandato de Jaime Albero, dedicado a asuntos mayores como la búsqueda imperiosa de una nueva bandera para el pueblo.
En el aburrido pleno que se celebró este mismo día no se trató nada de enjundia para esta localidad, lo que evidencia lo poco o nada que se trabaja en este Ayuntamiento. Curiosamente uno de los puntos tratados fue la “propuesta de declaración institucional a favor de unas inversiones justas para los valencianos y valencianas y en contra de los presupuestos generales del estado para 2017”, cuando en realidad lo que tendría que estar haciendo esta corporación es tomar ejemplo y llegar a un consenso con los diferentes partidos que forman esa torre de Babel que desgobierna el pueblo. Y digo torre de Babel porque aunque de cara a la galería todo son parabienes, en realidad no se ponen de acuerdo ni para hacer declaraciones, aunque sea para mantener las formas delante de la gente y no hacer más patente la falta de sintonía entre ellos. Mientras unos (Compromís), aseguran tener ya el borrador para presentar al alcalde, otros (PSOE) lloran por los rincones diciendo que hace más de cinco meses que le requirieron al concejal de Hacienda estos presupuestos, en un intento desaforado de echar balones fuera y culpar a otros del retraso.
El portavoz de DECIDO, otra de las partes implicadas en este desbarajuste de Ayuntamiento y en declaraciones al diario digital Pregoner.es , intentando salvar sus muebles justifica la pésima gestión culpando también a Jaime Albero: «Que PSOE y Compromís se dejen de rifirrafes entre ellos porque la misma responsabilidad tiene el concejal de Hacienda que el Alcalde».
Y el último miembro en discordia, Izquierda Unida, añade que “el presupuesto no está consensuado con nadie”
Todos se ponen de lado en la foto. Nadie quiere asumir responsabilidades. Y mientras tanto Sant Joan pierde subvenciones concedidas por la Generalitat ya que se exige que haya fondos en la partida a la que van destinadas.
Se puede entender que socios tan variopintos como IU, PSOE, COMPROMÍS y DECIDO (este último recordemos que fue concejal por el PP) tengan ideas enfrentadas, pero lo que no es de recibo es que un alcalde no sepa poner orden y sacar un pueblo adelante. Le queda grande el cargo a alguien que, recordemos, no fue elegido por el pueblo, sino pactado por los mismos que nos prometían días de vino y rosas y, por el momento, solo han resultado ser amistades peligrosas para Sant Joan.