El Consejo Superior de Investigaciones Científicas, en un estudio realizado en 2004, daba cuenta de del importante valor ecológico y pesquero del área marina del Freu de Sa Dragonera. Sus paisajes submarinos, con sus magníficas praderas de Posidonia océanica, zonas de gran producción biológica y de repoblación de alevines de especies con un importante valor pesquero. A pesar de la existencia del Parque Natural de Sa Dragonera, que ha sido clave para la conservación de este ecosistema, varios informes realizados entre 2014 y 2016 por el Servicio de Recursos Marinos de la administración balear ponen de manifiesto que las poblaciones de peces vulnerables se encuentran por debajo de su nivel óptimo.
En octubre de 2016 el Gobierno balear creó la Reserva Marina del Freu de Sa Dragonera, una iniciativa que ha dado excelentes resultados y que ha permitido una excelente recuperación de las diversas especies que habitan la zona. No obstante, la competencia del Gobierno de Baleares termina en lo que se denominan “aguas interiores” de la isla, requiriéndose la implicación de la Administración General del Estado para ampliar la zona de protección pesquera, tal y como reclaman tanto los colectivos conservacionistas y ecologistas como los propios pescadores de la zona.
Durante el desarrollo de la sesión celebrada ayer en el marco de la Comisión de Transición Ecológica, Margalida Quetglas, senadora por Mallorca e impulsora de la moción hoy aprobada, ha hecho hincapié en la importancia de proteger la zona norte del islote, con las cuevas y fondos de magrana y coralígeno, así como las zonas de aguas profundas, de vital importancia para la conservación de las diferentes especies marinas que las habitan.
Para Margalida Quetglas “hoy hemos dado un paso importante, pero no vamos a parar hasta que consigamos que efectivamente el Gobierno amplía la zona marina de protección de Sa Dragonera”. La senadora Quetglas ha destacado además “el amplio consenso social, entre ecologistas, pescadores y entre el común de los vecinos y vecinas de Baleares, que queremos que Sa Dragonera, una isla emblemática y con un alto valor ecológico, conserve todo su patrimonio natural”.