El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha reclamado al Gobierno de Mariano Rajoy que priorice el desarrollo de infraestructuras «necesarias», como el Corredor Mediterráneo, para poder aprovechar el «gran potencial» que proporciona a la Comunitat Valenciana su ubicación en el centro del Mediterráneo y la convierte en la segunda autonomía española en volumen de exportación.
“El Corredor Mediterráneo no es una exigencia, sino una realidad efectiva de pérdida de competitividad cada día que pasa”, ha subrayado durante la presentación del estudio Impacto económico de los puertos de la Autoridad Portuaria de València en 2015, en la que también ha reivindicado de nuevo la vía Sagunto-Teruel para comunicar el arco mediterráneo con el puerto seco de Zaragoza.
En su intervención, el jefe del Consell ha apelado a la implicación del sector público en la ejecución de infraestructuras que vertebren las comunicaciones, puesto que el puerto es “parte del Estado emprendedor y es este quien invierte realmente en el territorio”. Por ello, ha lamentado el “gran síndrome centralista” que ha padecido históricamente la Comunitat Valenciana, lo que ha generado una “falta de racionalidad en la inversión en las infraestructuras públicas” con resultados negativos para el conjunto de España.
Tal y como ha resaltado Puig, el informe dado a conocer este lunes, elaborado por la Universidad Politécnica de Valencia en colaboración con la Autoridad Portuaria de Valencia, evidencia la importancia de tener “un sector público potente, ordenado y eficaz” que, además de emprendedor, sea también “colaborador”. Como ejemplo de articulación institucional efectiva, el president ha hecho referencia a Parc Sagunt (un nuevo clúster valenciano), del que ha recordado que ya se ha vendido el 80% y ha avanzado que en los próximos días se celebrará una reunión “para cerrar el operativo de la venta del 20% que suponen las parcelas restantes”. Asimismo, ha reiterado la decisión del Gobierno valenciano para llevar a cabo la segunda fase de Parc Sagunt. “Si se dan las condiciones oportunas, sería deseable hacerlo con Sepides, nuestro socio de referencia, pero si finalmente no llegamos a un acuerdo, se hará igual por parte de la Generalitat”, ha puntualizado Puig.
En referencia al estudio impulsado por la Autoridad Portuaria de Valencia, el president ha indicado que los datos extraídos evidencian cómo el puerto de Valencia, que emplea a más de 30.000 personas, es un motor de la economía en el territorio valenciano. En ese sentido, ha expresado su satisfacción por que se reconozca el valor del puerto y porque este potencial se visibilice ante la sociedad.
Finalmente, el jefe del Consell ha apostado por fortalecer la relación entre las infraestructuras, como los puertos, y los territorios, a fin de fomentar “una buena convivencia”. Como ha explicado, ello implica un traslado de los beneficios generados por los enclaves portuarios a las poblaciones, además de estudiar maneras para minimizar los impactos negativos que se deriven de su actividad.