El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha reclamado que se abra de forma “urgente” la negociación política para la reforma del sistema de financiación autonómica y que se cumpla así el mandato de la última Conferencia de Presidentes para cerrar los términos del nuevo modelo en 2017.
Asimismo, ha manifestado que esta discusión puede ayudar a “poner encima de la mesa la gran reforma que exige el momento histórico, que es la reforma de la Constitución”. En este sentido, Puig ha recalcado que esta tarea hay que abordarla “desde el rigor, la templanza y la serenidad, huyendo del mal entendido emocionalismo que provoca la pérdida de la razón”. Así se ha expresado en la clausura del seminario Una lectura coral del informe de la comisión de expertos para la revisión de la financiación autonómica, organizada por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) en el Centre Cultural La Nau de la Universitat de València.
Puig ha reiterado su agradecimiento tanto a los participantes del seminario, como al profesor Francisco Pérez, el representante de la Comunitat Valenciana en el grupo de expertos para la revisión del sistema de financiación autonómica, por todo el trabajo “intenso, generoso y comprometido” que ha desarrollado durante los últimos meses.
En cuanto al documento que recoge las conclusiones de la comisión de expertos, el secretario general de los socialistas valencianos ha explicado que se trata de un informe “profundamente importante para avanzar en la solución política” y que ha permitido trasladar al terreno del rigor algunos planteamientos sobre la organización territorial.
El president ha destacado que el informe incida en cuestiones como el problema de la insuficiencia financiera, que “castiga al Estado del bienestar”, o la mutualización de la deuda valenciana, que ha considerado irrenunciable si se quiere buscar un trato igualitario. “Tal y como destaca el documento, es evidente que hay que cambiar y revisar las reglas del juego”, ha declarado Puig, quien también ha aludido a la necesidad de “dejar un espacio abierto a la cooperación y a una reflexión que vaya más allá de la casuística de cada comunidad autónoma”, con el objetivo de evitar planteamientos sesgados o parciales.
En este sentido, ha recordado que la Generalitat no hace un planteamiento “particularista ni segmentado” sobre la reforma del sistema de financiación autonómico, sino que plantea una solución para todo el país, pero que también pueda partir “desde un ámbito de coparticipación y no sólo desde el centralismo”. Asimismo, el socialista también se ha referido a la ineficacia de los anteriores modelos de financiación de 2002 y 2009, que “han quedado anclados en unos planteamientos de statu quo que no podemos compartir y que no han dado solución al problema”.
Es por ello que ha insistido, como vienen haciendo otros presidentes socialistas como Díaz y García Page, en que la reforma debe contemplar “un principio con el que es difícil que alguien pueda estar en desacuerdo, que es que tenemos que buscar la igualdad entre los ciudadanos y la singularidad entre los territorios”.
“España tiene un problema territorial y tiene un problema de desigualdad entre ciudadanos”, ha añadido el president, quien ha llamado a buscar una solución “enfocada hacia una visión federal”, tal y como quedó reflejado en las resoluciones políticas del último congreso socialista. “Es evidente que la solución del problema de la financiación forma parte de la solución integral del problema territorial en España”, ha manifestado.