Una vez acaba La Liga, esa que ahora se quiere olvidar con rapidez porque ha ganado el Atlético de Madrid, comienza la temporada de sequía periodística con noticias reales. O cuando menos con artículos sobre algo mucho más tangible que los posibles fichajes y ventas de unos y otros. En Valencia igual tienen más trabajo porque los dueños moverán mucho todo aunque no mejore el equipo pero se muevan los euros y los dólares. Una pena lo que sufren. Otros equipos también tendrán sus movimientos, muy controlados, pero en cantidad similar a los de otros años. Algunos esperando descartes, otros fichando lo que se pueda. Luego están los cuatro primeros clasificados.
El Sevilla se ha movido rápido para tapar un hueco en la delantera, pero como es habitual fichará si salen jugadores. Si ponen muchos millones por Koundé igual Monchi se lanza a fichar a ese jugador ucranio que juega en no se sabe dónde pero que acaba dando rendimiento (o no, que algún pufo ha fichado). También estará pendiente de los jugadores que aparezcan en la Eurocopa o la Copa América por si hay suerte y se puede hacer con ese jugador medio barato, de óptimo rendimiento y venta multimillonaria. Poco más se moverán las cosas por ese terreno por lo que la rumorología se centrará en salidas imaginadas o reales.
En el FC Barcelona se están moviendo rápido pero, y esto es importante, por jugadores que llegan gratis. Si hay que poner dinero Laporta y su equipo miran hacia el cielo o hacia la cantera. Como se ha dicho para los cuatro primeros, antes de entrar deben salir. Lo que en el caso de Barça pasa a ser además igual no entra nadie más pero se tienen que ir unos cuantos porque Bartomeu ha dejado la caja tan vacía que no hay ni telarañas. El poco dinero que había se lo han gastado en Emerson y ya. Eso sí, alrededor del club blaugrana hay una amplia red de medios de comunicación que viven de su información por lo que se venderá humo como nunca. Un humo tan cegador que impedirá distinguir lo fantástico del deseo platónico.
Hasta hace poco siempre los medios han vendido amores platónicos, especialmente en los tres grandes equipos. Que si Lautaro, que si Pogba, que si Neymar… chocando con la realidad de que a los demás equipos les gusta cobrar los traspasos en euros o libras, no en billetes de monopoly o en jugadores descartados hasta para cesiones. Ahora es que directamente venden humo cegador, venden mentiras, venden la primera tontería que encuentran en redes sociales. En realidad para descubrir un posible fichaje real hay que descartar seis mil mentiras. Da igual si el medio de comunicación que publica la noticia es amarillista, no ha acertado jamás y ha sido denunciado por mentir, o si los propios interesados lo desmienten. Hay que vender periódicos o clics digitales y siguen mintiendo a sabiendas y sin confrontar las noticias.
Dos ejemplos recientes. Que Saúl está pensando salir del Atlético de Madrid es conocido desde hace tiempo. Que salga o no ya se verá dependiendo de si le convencen las ofertas que tenga y si ponen los euros que pidan en el palco Forbes. Eso es comprensible y real. No es humo. Ahora bien, publicar que el Bayern de Múnich había ofrecido ochenta millones de euros es un humo tan denso que ni el provocado por las bengalas de Valladolid. Que los desmintiese el tipo que más sabe del equipo bávaro en redes no ha bastado, pero es que cualquiera que busque las noticias de hace tres o cuatro meses se daría cuenta que esa cantidad ya fue desmentida desde el propio equipo alemán. Clics a mansalva por humo. Y lo de Trippier que se está colando en todas las redacciones tres cuartos de lo mismo. Miren de qué medio salió la noticia y confróntenla con las palabras del propio jugador hace tres días en Inglaterra. Que si fuese real la primera Miguel Ángel Gil llevaba en brazos a Saúl hasta la sede del Bayern. Y si no cuela con los alemanes se coloca un trueque con un jugador de la Juventus. Si al final decide salir Saúl se sabrá de la misa forma en que se supo el fichaje de Trippier, en el último minuto.
Todo esto es comprensible (el Atleti debe tener ya avanzados unos doscientos fichajes según los medios) porque el verdadero generador de humo cegador, el Real Madrid, ha sido claro. El único dinero disponible es para ver si se engaña al jeque qatarí con Mbappé (160 millones en cash como poco). El resto serán salidas si es que se puede colocar a alguno. ¿Por qué creen que Ancelotti ha fichado por tres años? Porque ya le han dicho que el primero le perdonan lo que pase porque igual no se ficha a nadie. No hay dinero en las cajas de los equipos grandes y sin ventas (en muchos casos imposibles por la calidad demostrada y los salarios que se manejan ¿quién ficharía a Isco, Vitolo, Coutinho…?) poco más se puede hacer. Y más en el caso del Madrid que igual no puede jugar en el Bernabéu (¿o habría que llamarle Badulaque por la cantidad de cosas que van a vender en vez de fútbol?) hasta bien entrada la temporada.
Cuando lean en redes sociales, en periódicos o en una pintada en el metro que se va a producir tal o cual fichaje huyan. Es humo. Un humo cegador para entretener a las gentes hasta que vuelva el fútbol de clubes. Porque esa es otra, al no haber jugadores del Real Madrid en la selección pareciera que ya no es la selección sino otra cosa poco patriótica. Si tienen alguna duda miren en su buscador preferido. Busquen en los países de donde se dice que viene el rumor. Revisen la información antes de tragarse todo el humazo que ya están lanzando por doquier. Es más, hasta se podría dar una máxima: hasta después de la Eurocopa y la Copa América no habrá muchos movimientos (salvo con jugadores que no jueguen esos campeonatos). Y esto contando con que no sancionen no inscribiendo en Champions a los tres de la Superliga…