Que exista algo como EDAtv sólo es posible por la concatenación de diversos factores tecnológicos, políticos y culturales. La implantación de plataformas como TikTok, X, Instagram, los reels de Facebook/You Tube y demás zarandajas digitales han provocado la disminución de la atención y la reflexividad. Ahora se degluten informaciones de dos minutos, y cuanto más exaltadas mejor. Se cansan al leer informaciones que tengan más de tres mil palabras, pero se da veracidad a cualquier pintamonas que tiene un canal o hace el imbécil en las redes. Esto en vez de ser utilizado en la esfera política como algo negativo acaba siendo subsumido y exportado. A hacer el zángano con un micrófono se le llama periodismo. Al decir palabras inconexas y/o encargadas pensamiento. A la demagogia se le califica de columna de opinión. A servir al amo, editorial.
Así sucede que en cualquier periódico o televisión se hace caso del primer sinvergüenza que aparece por allí, se eleva a los altares al que más grita y el mundo cultural aparta a las personas creativas para dar cabida a toda esta recua de mulas. Se dejan engañar, porque no hay efecto arrastre sino engaño o autoengaño, para engañarles a ustedes. Ayer mismo Víctor de Aldama, un tipo que ha corrompido a políticos para hacer fortuna, un ser despreciable en términos morales, decía que sabía algo de amaño de elecciones con papeletas que tendría que ver con Indra. Nunca hay que dudas que cualquier político, cualquiera, intentaría sacar ventaja si pudiese cometiendo fraude electoral. El que diga que no, miente. Ahora bien ¿saben los periodistas cómo funciona el sistema de recuento electoral en España?, ¿lo saben los directores de medios de comunicación?, ¿lo sabe usted? Si lo saben y publican esas frases es que mienten adrede. Y si miente es que no son periodistas sino panfletistas, en el mejor de los casos, sino sobrecogedores.
Otro caso que está todos los días en los medios, el tiempo que el hermano del presidente Pedro Sánchez estuvo viviendo en Moncloa y lo que hizo. Partiendo del hecho de que, pese a ser algo residencial del presidente y puede invitar a quien le venga bien, es poco ético tener a David Sánchez allí viviendo porque le está cayendo la mundial por un posible amaño «político» de un puesto de trabajo en la Administración pública. Como se sabe que Sánchez carece de ética alguna y noes primer presidente que aloja a un familiar, pues ¿qué interés tiene lo del hermano? Que ha cometido, lo afirman no lo suponen, fraude fiscal porque decía que vivía en Portugal. ¡Perfecto! ¿Qué dice la ley sobre los tiempos para darse un fraude fiscal? El silencio aparece. Nadie dice los meses que puede alguien residir en España para no ser considerado fraude fiscal. ¿Por qué? Porque si los dijesen tendrían que probar que el hermano ha incumplido ese tiempo.
Ahí tienen a Vox preguntando por si ha generado algún gasto, dónde dormía, cuánto estuvo y por qué. Gastos ha generado. Dormir en alguna cama. Las otras dos preguntas son claves pero ningún periodista lo ha sabido responder sino que se han lanzado no a informar sino a ajusticiar como defraudador. El único lapso temporal que han ofrecido son cuatro meses. Bien, pues esos cuatro meses no suponen que haya cometido fraude fiscal y toda la marabunta no ha servido de nada salvo de beneficio electoral para alguien que luego aporta algo sobrecogedor. ¿Por qué ha estado allí? Si ustedes tuviesen una constante persecución mediática y un hermano con un sitio seguro… Y no, no eliminaría su línea telefónica para que Hacienda no le geolocalizase, lo haría para esconderse. Porque esa es otra, la facilidad con la que hacen sentencias.
¿Desde cuándo Hacienda está habilitada para geolocalizar a una persona sin la intervención de un juez? Desde nunca pese a los rumores que existen de ello con la tasa Google. Desde luego pueden solicitar la IP de los móviles para saber si son «españoles o no», pero ningún funcionario puede ponerse a geolocalizar a nadie sin permiso de un juez y la intervención de alguien que —policía nacional o guardia civil— lleva a cabo la intervención. Entonces por qué se inventan cosas que saben que son una ilegalidad mayor. Con lo sencillo que es decir que lo ha dejado porque le llaman insultándole, porque quiere guardar la privacidad en momentos difíciles, porque igual se ha comprado un prepago, hay miles de razones antes que lo falso. Pero a lo falso se le da bola, o bulo, porque vende más, porque es más escandaloso, porque impacta más en personas que cada vez utilizan menos el cerebro.
Y esto que, en esta ocasión ha sucedido con el señor Sánchez y sus problemas de corrupción, amiguismo y familiares, mañana pasará con Feijoo, con Abascal o con quien sea. Los que cobran de un bando dirán mentiras y los que cobran del otro buscarán mentiras o escándalos inventados para acosar al otro. Al final como el sistema amigo-enemigo de Carl Schmitt funciona muy bien en lo etéreo y líquido, pues todos se aprovechan. Por favor, antes de lanzarse al cuello de alguien, o de pensar cualquier estupidez, primero infórmese y tenga prudencia. La que ya no tienen ni los medios de comunicación, ni la clase dominante, ni los imbéciles que pululan por las redes sociales. Pruebas, pidan pruebas y no hagan como la «Nancy pechitos» de la flotilla de Gaza que va negando hechos comprobados.