El Metro de Granada, sistema de transporte que gestiona la Junta de Andalucía y no el Ayuntamiento, alcanzó ayer, Jueves Santo, los cinco millones de viajeros acumulados desde su puesta en servicio el pasado 21 de septiembre. Debido a la gran afluencia de usuarios durante los primeros días de esta Semana Santa, el metro mantendrá el intervalo de paso de un tren cada nueve minutos de 17.30 a 23.00 horas durante el Jueves, Viernes y Sábado. De esta forma se va consolidando el ritmo de crecimiento de esta infraestructura, especialmente durante los días laborables, lo que da cuenta de la aceptación del nuevo medio de transportes para la ciudadanía del área metropolitana, que lo utiliza para los desplazamientos cotidianos.
De hecho, la media diaria de pasajeros aumenta considerablemente a lo largo de los meses en servicio. En el año 2017, la media diaria se sitúa en 25.519 pasajeros/día, mientras en el año 2018 la media diaria supera los 27.000 pasajeros/día. Estos datos se acercan al objetivo previsto por la Consejería de Fomento y Vivienda para el año 2018, que estima unos 11 millones de viajeros totales en el año, lo que se traduce en una media diaria de 30.000 pasajeros. En días laborales, la media de pasajeros rebasa las expectativas, ya que en el año 2018 supera los 31.000 pasajeros/día.
Por estaciones, las cifras de viajeros registradas en estos días festivos consolidan el liderazgo de la estación soterrada de Recogidas, que acumula el 20% del tráfico de personas en el metro. Le siguen con mucha distancia las paradas de Sierra Nevada, Cerrillo Maracena, Caleta, Armilla y la estación de Méndez Núñez.
El servicio de metro ha consolidado durante esta semana festiva la frecuencia de paso, con un intervalo de 9 minutos en horas punta, algo que los usuarios estiman todavía demasiado. Este intervalo de paso se mantendrá durante los días festivos y también el Sábado. Además, el domingo 1 de abril, se mantendrá la frecuencia de paso de 11 minutos hasta el horario de cierre, a las 23.00 horas, sin retirar ninguna unidad de circulación, tal como se tenía previsto.
Tanto la mejora del intervalo de paso, que se mantendrá después de la Semana Santa, como de la velocidad comercial son factores de consolidación del servicio de transportes, que contribuyen a fidelizar el uso del metro. De hecho, una vez finalice el llamado ‘proceso de acoplamiento’, el metropolitano contempla la posibilidad de mantener una frecuencia de paso de un tren cada 8 minutos en hora punta y una velocidad comercial de 20,6 kilómetros hora, lo que supone prácticamente el doble de rápido que el bus y el resto del tráfico motorizado en zona urbana.