Claude Mangin, esposa de Naama Asfari preso político saharaui condenado a 30 años y actualmente detenido en Kenitra, permanece desde la pasada semana en huelga de hambre para exigir el derecho de visita a su marido que le es negado desde octubre de 2016.
La activista francesa Claude Mangin-Asfari, ha manifestado que su mayor deseo es “volver a Marruecos para ver a mi esposo Naama Asfari, preso político saharaui, condenado a 30 años de prisión tras ser juzgado, por dos veces, injustamente junto con otros camaradas por su lucha pacífica por la independencia del Sáhara Occidental, ocupada por Marruecos desde hace más de 40 años.
El preso saharaui recibió el Premio de Derechos Humanos concedido por la Fundación ACAT para Dignidad Humana en enero de este año, y, además, el Comité contra la Tortura de la ONU, en Ginebra, condenó a Marruecos por la tortura ejercida sobre Naama Asfari en diciembre de 2016. A pesar de esa presión internacional, desde octubre de 2016, Claude Mangin no está autorizada para entrar en Marruecos.
Tras su cuarta expulsión de Marrucecos, la ciudadana francesa decidió entrar en huelga de hambre indefinida la pasada semana en la ciudad francesa de Ivry-sur-Seine, ciudad en la que reside, y que nombró a Naama Asfari Ciudadano Honorario 3 años consecutivos.
Con su gesto pretende hacer un llamamiento no sólo a instancias internacionales como Naciones Unidas y la Unión Europea; también al Gobierno francés. Instituciones todas ellas de las que aún no ha obtenido ningún resultado respeto a su legítimo derecho a visitar a su marido en Marruecos
El representante en Lorca de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui, Antonio García Ros, ha expresado su solidaridad y la de la agrupación que representa con el preso político, con su mujer y por la causa de la libertad del pueblo saharaui en la lucha pacífica por la independencia.