En un acto cargado de emotividad por la efemérides castrense, Cospedal aprovechó su intervención pública al final del acto para señalar que “solo con unas Fuerzas Armadas plenamente equipadas y preparadas se podrá conseguir garantizar la seguridad de todos los españoles”.
En su alocución ante las autoridades y miembros del estamento militar, la titular de Defensa afirmó que España “necesita que sus militares tengan sus capacidades a punto y que éstas sean modernas y adecuadas”, al mismo tiempo que “se debe velar por la seguridad de los militares al utilizar los equipos necesarios” para añadir que “la defensa de toda una nación nos reclama ese esfuerzo y tenemos que estar a la altura de ese desafío”, indicó.
Cospedal recordó también la labor docente de la AGA a lo largo de estos 75 años desde su creación, por la que han pasado más de 10.000 alumnos de 73 promociones y en la que se han realizado casi un millón de horas de vuelo.
La titular de Defensa advirtió de que la AGA deberá también asumir el reto de “integrar el nuevo sistema de entrenamiento, ya que el avión C-101, que tan excelente resultado ha proporcionado al Ejército del Aire, alcanzará en poco tiempo el final de su vida operativa”. Más adelante, Cospedal anunció que el nuevo sistema integrado de enseñanza en vuelo “ deberá estar plenamente implantado antes de la retirada del servicio de este avión», avanzó.
Por ello, expresó su confianza en que la AGA y el Ejército del Aire “sepan adaptarse a los cambios que han de venir” no sin antes recordar que “en cada una de sus acciones operativas o de entrenamiento, el Ejército del Aire sirve con orgullo su deber de proteger a la bandera y a España”.
Igualmente hubo un momento para respaldar la labor del personal docente y de la unidad militar al cumplirse los 75 años de su fundación. Unos profesionales, añadió Cospedal, que durante estos 75 años, “han cumplido ese deber que establece que proporcionará a los futuros oficiales del Ejército del Aire su formación, adaptándose a las circunstancias y exigencias propias del transcurso de los años”.
En este sentido, Cospedal mostró su confianza en que los componentes de la AGA “sepan adaptarse a los futuros cambios”, para posteriormente mostrar un guiño de apreci9 hacia la Comunidad de Murcia “por todos apreciada por su cariño a la familia militar, que siente esta región como su propia casa”.
La Ministra de Defensa también valoró con sus palabras a los cadetes de la AGA, señalando que “la cultura del esfuerzo, la disciplina, dedicación y vocación de servir a España como aviador del Ejército del Aire son algunos de los valores indispensables deben practicar en su carrera profesional”. En este mismo contexto, Cospedal afirmó que “en el ADN del Ejército del Aire se exige estar a la vanguardia de la innovación tecnológica”, manifestando también que “la enseñanza de esta academia y sus resultados son una prueba del reconocimiento a nivel nacional e internacional hacia la mejora de la calidad”.
Acto militar
Las secuencias militares comenzaron con la llegada de Cospedal a la plaza de Armas de la AGA, acompañada del Jefe de Estado Mayor del Aire, Javier Salto y del Coronel de la AGA, Miguel Ivorra, procediendo a recibir los honores y posterior revista a las tropas formadas en la explanada central, donde destacaba la presencia de una formación ataviada con antiguos uniformes de la Academia General del Aire.
Tras la lectura del Decreto fundacional del 28 de julio de 1943, la ministra impuso la corbata a la Academia y, minutos después, el JEMA, en nombre de todas las promociones egresadas, recogió un regalo institucional por parte de la AGA; un boceto a escala del mismo monumento que se va a inaugurar con motivo del 75 aniversario.
Después, la unidad de música de la AGA interpretó la pieza ‘AGA 75’, tras lo que el coronel de la AGA resaltó el papel que la Academia ha desempeñado a lo largo de estos 75 años, una “fábrica de sueños”, dijo, donde se desarrolla el espíritu aviador “al servicio de España”.
La ceremonia continuó con un desfile tanto terrestre, en el que también se pudo ver a seis alumnos de la Academia con distintos uniformes de época, como aéreo, con aviones desde la época fundacional que han prestado sus servicios en la AGA, el E-26 y Patrulla Águila.
En concreto, participaron un componente de aeronaves que han estado en servicio en la AGA a lo largo de sus 75 años de historia, desde su creación el 28 de julio de 1943 con el Decreto, aún vigente, que representa los valores que hacen posible que este centro de formación haya cumplido con su misión.
Las aeronaves volaron en bloques y a diferentes alturas. Así, la primera formación estuvo compuesta por tres Bücker, un avión que estuvo en servicio hasta 1976; mientras que la segunda formación estuvo compuesta por un T6, una avioneta Mentor, una pillán y un C-101 de la Escuela Básica. Por último, la Patrulla Águila cerró el desfile aéreo en la avenida principal.
Como siempre, el homenaje a los Caídos también estuvo presente en esta ceremonia castrense. La corona fue depositada junto al monumento del mismo nombre y se entonaron los ya tradicionales acordes ‘La muerte no es el final’. Los alumnos con uniforme especial fueron los encargados de depositar la corona de laurel y efectuarono una salva de honor con munición de fogueo.
El acto concluyó con la inauguración del monumento representativo de estos 75 años de historia, una escultura diseñada por los artistas que trabajan para la fundición Fundirmetal, taller de referencia en el ámbito escultórico, que viene a representar el esfuerzo de su potencial humano representado por un cadete, un piloto y un militar de apoyo representantes de todos los colectivos, con el emblema del 75 aniversario.