El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha anunciado esta mañana que va a impulsar la creación de una comisión parlamentaria de investigación en el Congreso sobre los negocios y supuestas prácticas irregulares realizadas durante años por Juan Carlos de Borbón aprovechando su cargo de jefe del Estado, tal y como llevan varios días desvelando los medios de comunicación a partir de distintas declaraciones realizadas por la empresaria Corinna zu Sayn-Wittgenstein, unida por una estrecha amistad con el monarca.
En respuesta a las preguntas de los/as asistentes al Desayuno Informativo del Fórum Europa en el que participaba, Garzón señaló que, si se cree conveniente, podría pedirse hasta la comparecencia del propio rey emérito, que está sometido ahora al imperio de la ley sin ningún tipo de privilegios de los que disfrutaba hasta 2014.
Razonó que por esa comisión de investigación debería comparecer “todo el mundo que esté afectado”, incluido el hoy rey emérito, y recordó que la propia ministra de Justicia, Dolores Delgado, ya ha valorado públicamente que Juan Carlos tiene simplemente la condición de aforado, pero desde que abdicó su figura “no es inviolable, por lo que puede exponerse” a esa investigación, ya que existe un “hueco legal” para ello.
El máximo responsable de IU valoró que buena parte de las extensas informaciones aparecidas ahora sobre las actuaciones del anterior jefe del Estado “no son novedades”, ya que desde hace tiempo “había indicios suficientes que apuntaban en esa dirección”.
Recordó que Izquierda Unida ya formuló hace cinco años distintas baterías de preguntas parlamentarias por escrito -algunas firmadas por él mismo- dirigidas al Gobierno del PP sobre esta misma cuestión y todas ellas “quedaron sin respuesta” al impedir el Congreso su tramitación. Denunció que ello convierte a la monarquía es “una sombra, una zona de oscuridad” de la democracia.
Garzón destacó, eso sí, que lo que sí hay hoy son “pruebas” de las informaciones que llevan años circulando, gracias precisamente a “esas declaraciones de uno de los actores, la princesa Corinna, que apuntan a que esta forma de actuar incluso era una posible norma” para Juan Carlos de Borbón.
En el marco de este análisis, el máximo responsable de IU recordó que las “distintas dinastías que han reinado en España, desde los Trastámara a los Borbones, pasando por los Austrias, han perjudicado siempre al pueblo llano” incluso bajo regímenes políticos liberales. “Todas ellas han compartido la particular obsesión de que la cosa pública en realidad es la cosa privada”, apostilló.
Del mismo modo, Garzón valoró que las actuaciones delictivas por las que ha sido condenado Iñaki Urdangarin “no hubieran sido posible sin la participación directa de la Casa Real”. A su juicio, “resulta incomprensible” que en una democracia siga existiendo “una institución blindada” como la Monarquía que “actúa prácticamente con total impunidad”, de ahí que reconoció su “enorme sorpresa” por el “silencio que están manteniendo el Gobierno y la Casa Real” ante las informaciones publicadas.
Para Alberto Garzón, “hay determinadas instituciones del Estado”, incluido el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), que han sido “conscientes de las tretas” ejecutadas por el anterior jefe del Estado y le protegieran pensando que “proteger la Monarquía es proteger España, algo que no es cierto”.