Inquietante el panorama que están dibujando los medios de comunicación sobre el curriculum vitae de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras su fichaje por el Instituto Empresa (IE) para dirigir el centro de Estudios sobre África. Diversas investigaciones periodísticas, que no han sido desmentidas, y que parecen corroborarse por el propio currículo de la persona interesada, apuntan a que Gómez no tendría licenciatura en Marketing, ni título oficial alguno. ¿Impiden estas informaciones que el IE la contrate? No, pero sí que habría algunas limitaciones como se verá. Pero lo que causa perplejidad es que haya podido impartir docencia en una universidad pública. Vayamos por partes.
La información que aparece en su CV nos dice que Gómez curso estudios de Marketing en una Academia privada, o un centro de estudios superiores, esto es, un centro de estudios especializados para aquellos y aquellas que no obtenían el ingreso a la Universidad o que deseaban estudiar de esa forma. M&B Escuela Superior de Marketing y Negocios no ofrecía en los años en que estudió Gómez estudios universitarios, eran profesionales y sin necesidad de nota de selectividad ni nada por el estilo. Por tanto, primera incidencia curricular (algo que parece normal entre personas de la política y/o cercanas). No tiene licenciatura en Marketing, no oficial, ni oficiosa. Para ello tendría que haber ido a la Universidad y estudiar Empresariales.
A Santos Cerdán, el coordinador Territorial del PSOE, se le llenó la boca afirmando que el curriculum de Gómez le hacía merecedora de entrar a trabajar en el IE. Pues parece que no tiene licenciatura, y lo otro que ha estudiado es otro curso o Master profesional, sin validez académica. Para trabajar como cargo directivo, y sólo como cargo directivo, puede trabajar en el IE quien así desee la dirección. Cuestión de estrategia empresarial. Siempre y cuando sea un cargo profesional y al ser un centro docente privado. No pasa lo mismo en la Universidad pública.
Como ya dijimos en estas mismas páginas hace unos días, el Instituto Empresa habría fichado a Gómez para que se le abran puertas, nada extraño en sí. Ahora bien, como cuenta El Mundo suena raro que se haya contactado para ello a Javier Solana y Josep Borrell. Hace dos meses, nada más llegar Sánchez a la presidencia del Gobierno, se produjeron los primeros contactos, concretamente con Borrell en un privado del Hotel Wellington. Diego del Alcázar, jefe del IE, tanteó con el ministro de Exteriores la posibilidad de que Gómez dirigiese el Centro de Estudios sobre África. Una buena gestión empresarial que deja bien a las claras la permeabilidad de política y grandes grupos empresariales. Nada nuevo. Poco ético para muchas personas, pero no ilegal. Lo que sí ha podido ser ilegal es la docencia de Gómez en la Universidad Complutense de Madrid.
Según ese mismo curriculum Gómez habría dirigido e impartido docencia en el Dirección de Fundraising Público y Privado en Organizaciones sin Ánimo de Lucro de la UCM. Pues debería haberlo hecho, ni podría hacerlo porque carece de licenciatura (lo que hoy se conoce como grado). Profesionalmente puede ser la mejor, pero para ser profesor universitario, aunque sea tipo asociado (profesional y/o experto), se debe tener un título mínimo como la licenciatura. A ello debería sumarse investigaciones académicas si es algo más que profesor asociado y, especialmente, tener acreditación de la ANECA. Es de suponer que el Centro Superior de Estudios de gestión habrá verificado la titulación oficial y que su directora Paloma Román, otrora vinculada al PSOE, habrá cotejado los títulos y acreditaciones.
Por todo ello la UCM debería dar explicaciones sobre el porqué de la docencia de una persona que no está cualificada para ello. Algo que deberá hacer también el IE si Gómez impartiese clase de algún tipo. No posee, como han demostrado las diversas investigaciones y ella reconoce en su CV, titulación académica alguna para poder impartir docencia universitaria y académica a ese nivel. Puede dar clases si quiere en una academia privada, pero en la universidad pública no, y en la privada tampoco. No tiene cualificación, ni acreditación de la ANECA para ello. Puede dirigir centros pero no impartir docencia, ni hacer programas docentes. Si no hizo carrera en su día no es problema de muchísimas personas que sí lo hicieron, que pasaron su selectividad, que estudiaron cinco o seis años de licenciatura (no cuatro), que hicieron sus cursos e investigaciones y que hoy no imparten docencia por no estar acreditados (el gran misterio que Pedro Duque quiere modificar de las acreditaciones de la ANECA). Ellos hicieron sus licenciaturas y doctorados (un 8% en el paro) y Gómez no. Podrá dirigir, con muchas sospechas, un Centro de Estudios pero no impartir clase. Y la UCM deberá explicar por qué tiene/tenía una profesora sin cualificar.