“Pedro Sánchez es un mal español, enchufa a todas las personas de su partido, trae a peligrosos negros para que sean manteros y acaben con el trabajo de los españoles en connivencia con Podemos, quiere romper España, y se vende a Merkel”. Algo piensan en Ciudadanos porque insisten día tras día en que Pedro Sánchez haga el programa de Ciudadanos. Les gustaría que el presidente del gobierno hiciese todo lo que ellos y ellas quieren. Esta tensión psicológica que tienen en la formación naranja acaba por trasladarse a sus discursos e inconscientemente piden a Sánchez que sea como ellos. El último Carlos Carrizosa que ejercía ayer como “cuñado de guardia”.
“Pedro Sánchez es un presidente débil que mira hacia otro lado por sus hipotecas con los partidos separatistas” ha dicho Carrizosa. Y todo ello porque la Mesa del Parlament han admitido a trámite una moción de la CUP que sigue con la hoja de ruta de la independencia. De la misma forma que se admiten a trámite mociones de Ciudadanos sobre cuestiones sin competencia autonómica, como pasa en la Comunidad de Madrid, habrá que esperar a que llegue esa moción o no al Pleno. Una vez allí podrá intervenir jurídicamente el Gobierno. No es que miren hacia otro lado, sino que hay procedimientos, iguales que los había cuando el PP gobernaba. Parece que en Cs no han entendido las palabras del presidente cuando afirmó que serían igual de contundentes o más aplicando otro 155 si hiciese falta. O es que quieren meter los tanques y matar a todos los nacionalistas, o más probable seguir con la escalada de tensión y fractura social para no perder votos, para que la sociedad se divida aún más y ellos sacar rédito. Porque, parece en realidad, que Cataluña como sociedad les importa poco o nada. Quieren la homogeneización de las personas… y la expulsión de los manteros.
Al final, acaba afirmando Carrizosa, “Cs tiene que hacer lo que el Gobierno no hace”. Denunciar al juzgado. La diferencia es que el gobierno pide un informe a los abogados del Estado y luego actúa vía Tribunal Constitucional. Como le explicó Rajoy a Rivera, el Gobierno por mucho que le moleste a Rivera, que lleva un dictador dentro según parece, tiene que cumplir la ley. Pues lo mismo vuelve a suceder con el Gobierno del PSOE. Le piden que vulnere la ley y si no lo hace le acusan de no hacer nada. Una estrategia gastada y que ya casi nadie compra. Habrá que ver si empujan y dan codazos Albert Rivera e Inés Arrimadas, como hicieron con Cristina Cifuentes en las manifestaciones de Sociedad Civil en Barcelona, y quieren quitar al presidente del Gobierno de los actos en recuerdo de las víctimas del terrorismo yihadista. Curiosamente, el inconsciente de Ciudadanos les hace decir “en apoyo a las víctimas”, porque ellos y ellas no quieren homenajes, ni recuerdo, están pensando en términos nacionalistas y contranacionalistas.
“España debería liderar una política migratoria para hacer frente a esta crisis humanitaria. Europa debe actuar de forma uniforme y coordinada” ha querido decir sobre la cuestión más peliaguda de la actualidad política. Esa misma que están activando de peligro constante de los inmigrantes manteros por las calles de nuestras ciudades. Como su ideología es cuñadista critican una cosa y la piden a la vez. Así siempre podrán decir que tienen razón. España debe dirigir y Europa debe actuar coordinada lo que significa que deben deliberar y llegar a un acuerdo. Por tanto lo que España pudiese decir debería contar con el visto bueno de los demás países y el componente de liderazgo no existiría. O es que en su ensoñación imperialista española ¿piensa que España tiene la fuerza suficiente para ello? Como Sánchez ha conseguido ciertos acuerdos en la materia hay que ponerle trabas, bien para que gane Macron (que es de los suyos), bien para achacarle su fracaso. Mientras ellos y ellas criminalizando a los manteros, pero eso no es contrario a la crisis humanitaria. Es política de seguridad. O fascismo según lo entienda el lector.