No siempre ha sido ese gran empresario que nos quieren mostrar las hagiografías, es más, algunas de sus experiencias públicas han sido realmente catastróficas y con el grave riesgo de haberse quedado en la ruina arrastrando a muchas personas tras él. Su primer paso por el Real Madrid y el segundo, salvo la etapa Ancelotti y Zidane, tampoco ha dejado grandes conquistas deportivas y ha visto como sus rivales, catalán y madrileño, han aumentado su colección de trofeos. En política qué decir de su paso por UCD y como secretario general del Partido Reformista y la operación Roca. Sí Champions en cinco años y una liga, pero ¿se ha acabado el ciclo? A nivel empresarial ha tenido reveses en los últimos meses ¿ha vuelto el gafe a rodear a Florentino Pérez?
Comenzando por la parte empresarial. Cabe recordar que Pérez se empeñó en hacerse con Iberdrola poniendo al borde del precipicio a ACS por el alto endeudamiento que le produjo. Incluso la familia March tuvo que decirle que cejara en el intento pues no era como hacerse con Dragados, que complementaba al grupo empresarial creado por la unión de OCP, Ginés Navarro y Vías. Era meterse en el sector energético para intentar ampliar negocio, especialmente por el fuerte desarrollo de las nuevas tecnologías energéticas. Así, también se metió de lleno en la energía eólica y termosolar. El resultado de todo ello fue un enorme fracaso que genero una amplia deuda en la empresa, tanto como para poner cerca de la quiebra al grupo. A pesar de que sus buenos contactos políticos le salvaron de fracasos mayores por las cláusulas, ahora declaradas abusivas, en los proyectos como el Castor o las desaladoras, hubo de retirarse y vender con pérdidas. También le ha pasado en las compras de empresas de Ingeniería del mundo de la energía.
Sin embargo, parecía que todo cambiaba. ACS se hacía con la mayoría del consejo de la alemana Hochtief, una de las empresas de infraestructuras más grandes del mundo, y con varias medianas empresas en EEUU para meter cabeza. Así lograba situar a ACS como una de las majors en infraestructuras y servicios. Porque Florentino Pérez controla, gracias a la acumulación por desposesión, muchísimos servicios públicos españoles. El PP le quitaba la rentabilidad en las energías renovables, pero le entregaba servicios y hospitales para compensar. Así logró capear el temporal y hacer frente a la compra de Hochtief. El máximo esplendor rodeaba al presidente de ACS otra vez. Volvía a ser el “puto amo”.
No se puede decir que las cosas vayan tan mal como en el pasado en las empresas de “tito Floren”, empero las cosas se han torcido un tanto. Y parece que el gafe que le asaltó durante algún tiempo vuelve. En los últimos tiempos ha tenido que seguir desinvirtiendo en algunas de sus empresas que más réditos reportaban en España. Por ejemplo, Urbaser, que controla muchísimos servicios de basuras, alquiler de vehículos de limpieza o parques y jardines, fue vendida a un grupo empresarial chino. La familia March, a través de Corporación Alba, ha dejado el grupo empresarial ACS y prácticamente todas sus acciones en el mismo por discrepancias con el presidente (los Albertos siguen de momento). Una de sus empresas ha perdido un proyecto de 2.000 millones en Panamá por no haber presentado los avales bancarios. Eso sí, los amigos políticos siempre están ahí para ayudar. Porque, en un caso más de capitalismo de amiguetes, el Gobierno vendió todas las participaciones de Abertis (Autopistas de peaje y servicios) al conglomerado de Pérez y los italianos Atlantia. Una operación redonda en ingeniería financiera que veremos cómo sale. Pero… parece que el mal de ojo le ha llegado a sus socios desde que se juntan con Pérez.
Atlantia, a través de Autostrade, es la empresa que tenía la concesión del puente de Génova que se vino abajo y que ha provocado la caída de sus acciones un 25%, con Matteo Salvini amenazando con fuertes sanciones (mientras cenaba a todo lujo), y por culpa de falta de mantenimiento según las primeras investigaciones. También ha afectado a ACS que ha caído un 2% y a Hochtief que ha caído un 4,79% (casi comerse los beneficios últimos). Es producto todo esto del gafe de Florentino Pérez. Porque ya es mala suerte que ha sido unirse con Hochtief y ACS y venirse abajo un puente. Justo en el negocio que tienen juntos, la no renovación de la infraestructura (el negocio de Pérez) deja en muy mala posición a la nueva empresa creada tras la compra de Abertis.
El Real Madrid en un sin vivir.
No es que el Real Madrid vaya a estar peleando por el descenso, pero tras la fuerte y dolorosa derrota sufrida en la final de la Supercopa de Europa ante el Atlético de Madrid, las dudas se amplían. Casi todas las críticas se han encaminado a la falta de rodaje del equipo (la misma que los internacionales del conjunto colchonero, por cierto) y a la falta de algún retoque. Tiene buena plantilla sin duda, pero las dudas se generan si es suficiente para competir de tú a tú en Europa, que al final es lo que le gusta a los madridistas. Y ahí el vacío dejado por Cristiano, y en menor medida Kovacic, se acrecienta según pasan los días. Es más, el fichaje de Courtois para la portería (con la obligación del beso al escudo) puede generar más problemas que soluciones. La portería estaba bien cubierta con Navas y el prometedor Lunin más Casilla, así que traer un refuerzo porque era del Atleti y así molestar al vecino y rival, parece hacer daño en el vestuario. En la final, sin ir más lejos, Navas se comió el primer gol a decir de los entendidos y se le vio con nervios.
Ha estado mareando la perdiz en los medios de comunicación que controla (casi todos) con Neymar, Mbappé, Kane, Hazard y otros nombres, para crear expectativas en los aficionados, pero ni han llegado, ni llegarán. Los analistas hablan de un central más y desde la casa blanca filtran la llegada de un lateral izquierdo, posición que puede ocupar Nacho. Una mala suerte con los fichajes “galácticos” que se extiende al entrenador. La llegada de Julen Lopetegui, tras decirle que no cuatro entrenadores, hundió a la selección española (y eso que luego ha lanzado varias campañas contra el presidente de la FEF Rubiales) y no parece encajar con la plantilla que manejaba Zidane. Son casi dos años de salidas de grandes jugadores como James o Cristiano. Y amenazas de salida de jugadores importantes. Para un club que ha ganado cuatro Champions en cinco años no parece muy lógico.
Algo debe cocerse dentro y que señala a Pérez, pero nadie dice en los medios. O es simplemente el gafe de Pérez como en los años de Mourinho, de Pellegrini, de los galácticos aburridos. O es que Ancelotti y Zidane tienen flor que también puede ser. El caso es que los madridistas, después del repaso del Atleti, no lo ven tan claro, pero como nadie salvo un millonario muy millonario puede suceder en la presidencia a “tito Floren”, ahí seguirá hasta que se canse o no le salga rentable. Y fichajes ilusionantes parece que no llegarán para tapar a la gran estrella con la que confrontaban al Barça.
El hundimiento de Ciudadanos.
Claro que en política tampoco es que le estén saliendo las cosas últimamente. Ciudadanos y Albert Rivera caen encuesta tras encuesta mostrando un perfil xenófobo y fascistilla que tanto se aleja del perfil que deseaba Pérez cuando mandó a sus medios de comunicación apoyar y evitar las críticas a la formación naranja. Cuando tenía controladito a M. Rajoy, de repente van “los rojos” y ganan una moción de censura, algo que no estaba en sus deseos más cercanos. Aunque rápidamente acudió a la entrega de la cartera del ministro de Fomento, con José Luis Ábalos ha pinchado en hueso con el tema fútbol y las concesiones. De hecho, al poco de llegar al ministerio el entorno de Pérez mandó un recado al ministro en sus medios de comunicación porque tenía alquilado un local a una ONG que recibía subvenciones. Como si Ábalos hubiese sido el que las concedió o no pudiese alquilar su local comercial (que no es suyo completamente como dice en su declaración de bienes). Pero el recadito quedaba.
En el PP prefería a una tecnócrata y adoradora del poder como Soraya Sáenz de Santamaría pero le salió Casado, que tampoco es que le venga mal pero no es lo mismo. Tiene demasiada carga ideológica para su gusto. Una vez más el gafe acecha al presidente de ACS y el Real Madrid, ¿será temporal o se extenderá? ¿Pasará otra época mala el Real Madrid viendo como ganan sus adversarios o es una temporada de transición realmente?