La verdad es que lo ponen fácil en Ciudadanos, muy fácil en ocasiones, para demostrar que su ideología, el cuñadismo, se desmonta con sólo mirarla un poco. Que están en política para servir a los señores del establishment y lo que proponen fuera de esas órdenes son bufonadas. Unas propuestas que les sirven para decir que ellos presentan algo, aunque sea legalmente irrealizable como le ha pasado a Ignacio Aguado en Madrid, y castigar a los demás por no seguirles en lo ilegal si es necesario. Eso de buscar siempre salir bien en la foto tiene consecuencias al final porque el fotógrafo puede que esté cansado de esperarte. Y más cuando el CIS te dice que ya has llegado al tope y sólo te queda la cuesta abajo.
En esta ocasión, la bufonada que ha sido desmontada, ha ocurrido en Valencia. En Les Corts han presentado una propuesta para agravar aún más los delitos por corrupción. La cual ha sido rechazada por todos los grupos parlamentarios y no porque les afectase, en el PP deberían estar temblando, sino porque además de alegal parecía incidir en castigos hasta físicos. Pero lo mejor es dejar hablar al síndic (portavoz) del PSPV, Manuel Mata, quien en un minuto ha tenido la capacidad de desmontar todo el cuñadismo ideológico y las chapuzas legislativas. Esas mismas que indican que en Ciudadanos no están preparados y que, si son representantes de la Sociedad Civil como dice su gurú de la secta naranja, Albert Rivera, no cabe más que comprender porque España no crece más económicamente. Porque la incompetencia en sus cuerpos directivos es de aúpa.
Las cabezas pensantes de Ciudadanos han presentado en su propuesta que “habrá que buscar mecanismos en que la pena por responsabilidad política sea más severa y previa que la judicial”. Así sin pensarlo seguramente. De ahí que, con humor e ironía, porque el cuñadismo ideológico se combate de esa manera, Mata ha pedido a la secta naranja que explicase si se referían a “la lapidación, el aprieta pulgares o la gota malaya”. Porque, como ha seguido el diputado socialista, más grave que las multas económicas y la cárcel parece que sólo quedan castigos corporales o la pena capital. Son tan relajados en Ciudadanos que podrían estar pidiendo la silla eléctrica como parte de la responsabilidad política en casos de corrupción. Mejor que esto no lo oiga Juan Carlos Girauta que él es muy de estas cosas y su amigo Federico Jiménez Losantos le animaría además.
Como ha explicado el síndic Mata, además, la propuesta de Ciudadanos se salta por completo la presunción de inocencia (aunque dicen defenderla, en una muestra más de cuñadismo) antes de la aplicación de la pena. Es conocido que ya existe la “pena de prensa” o la “pena de pasillo de juzgado”, pero en Ciudadanos quieren el castigo previo aunque se sea inocente. Con sólo la acusación, a las que son muy dados en el cuñadismo ideológico, quieren que se cuelgue de los pulgares al acusado. Así sea sin pruebas porque es previa, evidentemente. Debe ser que en Ciudadanos no recuerdan que hasta las brujas quemadas tenían un juicio, injusto y manipulado sin duda, pero esa farsa se cumplía cuando menos. Ellos no.
También le ha recordado Manuel Mata que diputados y diputadas valencianas, así como los partidos, han combatido la corrupción con querellas y aportando las pruebas que podían obtener pese a la opacidad del PP valenciano en el Gobierno. El saqueo de la Comunitat Valenciana fue combatido por partidos y personas. Pero como en Ciudadanos son adanistas y creen haber inventado la rueda, es más, Rivera cree que es dios en la Tierra, pues se lanzan a mostrarse como los primeros que hacen algo. En parte tienen razón, son los primeros en pedir castigos físicos para personas que no han sido condenadas pero sí señaladas. Esto no es lo que suele hacer Rivera de “aguántame el cubata”, sino que la barra entera debe estar llena de cubatas. Eso sí, en luchar contra la violencia machista de Vox no se atreven. Como se ha contado en estas páginas han sido el único grupo que no ha apoyado una moción para bloquear que cualquier mercadeo de votos perjudique a los derechos de las mujeres. En Ciudadanos han salido huyendo y se han ausentado de la votación. Deben guardarse la carta de retomar un trifachito valenciano. Toni Cantó, que va por ahí insultado a los diputados de los demás grupos, quiere apoyarse en los neofascistas. Le hace sentirse cómodo.