No ha sido inusual que durante la temporada veraniega se sacasen algunas fotos de los políticos descansando. Si les alcanza el recuerdo desde la famosa paella de Miguel Boyer y Carlos Solchaga o el viaje de Felipe González en el Azor hasta José María Aznar fardando de vigorexia, por no hablar de los viajes en yates de narcos, son muchas las imágenes playeras o vacacionales. Cuando se está en la oposición se hacen posados (robados o no), cuando se está en el gobierno depende del momento político. Como este gobierno no ha tenido ningún buen momento político, porque no hay verano en que no estén liados con alguna cosa, pues han sido más fotos robadas que otra cosa.
El problema está en los enfermos que pueblan las redes sociales. Porque esto no es cosa del amigo de la ardillas o del patillas, no, la realidad es que existe un buen grupo de población que lanza todos sus prejuicios ideológicos a cualquier cosa que suceda. Si es un músico de derechas ya es malo, para los enfermos de la izquierda, y es buenísimo para los enfermos de la derecha, los cuales exigen a los ayuntamientos de ese perfil contratar a ese pobre hombre que pena porque no le contrata nadie. Si no estuvieran enfermos se darían cuenta que no es que ese cantante esté siendo perseguido sino que es cansino y malo (lleva repitiéndose durante cuarenta años). Lo mismo cabe decir de muchos “cansautores” que se quejan de lo mismo.
Estos enfermos, al trasladar su prejuicios a todo en esta vida, se han enfadado y han insultado a Yolanda Díaz porque estaba en bikini en una playa. Los clásicos de “es que le pago yo las vacaciones” habría que investigarlos porque huelen a funcionarios muchos —y a ellos también se las pagan los demás—. Este tipo de enfermos, al fin y al cabo, son los menos enfermos, los que insultan e intentan humillar a la persona fotografiada son los peores. Si fuese una “de las suyas” ni pagar vacaciones, ni fea, ni culo caído, ni infecta, ni nada, todo lo contrario, pero es una de “las otras”. Por un video, en la parte que menos se miente y se echa bilis de Ok Diario, donde se hace más periodismo por cierto, hay que matar a una persona o echarla de España.
Curiosamente se han fijado en si tiene hechas las ingles brasileñas, si tiene el culo más o menos caído, si la tripa es más o menos plana, si los pechos están más caídos o no, vamos se han fijado en todo el cuerpo de Díaz. Por ello no sería de extrañar que por las noches hayan tenido sueños eróticos con la vicepresidenta, obligándoles a levantarse empapados en sudor para acercarse al frigorífico y tomar algo fresco que les proporcione una bajada de la calentura. A más, no sería extraño que ante tanto detalle del cuerpo de la vicepresidenta todos estos seres hayan recurrido a la práctica de Onán mientras visualizaban el video. Son como todos esos nazis que ensalzaban la masculinidad y el macho-alfa teutónico pero luego eran homosexuales en sus casas. Hoy les molesta el video pero acaban enganchados al aparato.