Desde que el presidente Luis Abinader asumió la Presidencia de la República Dominicana, el país, a pesar de las crisis mundiales, ha avanzado en materia económica, democrática, ética, transparente y entre otras cosas, en la resolución de la defensa del medioambiente, la protección de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático.
En octubre de 2020, al comienzo de la implementación de este tipo de políticas, se hizo público el documento, “La Biodiversidad en la República Dominicana” que se enmarcó en los mandatos del Artículo 136 de la Ley Marco No. 64/00, sobre Medio Ambiente y Recursos Naturales, y los Artículos 21 y 22 de la Ley Sectorial No. 333/15 sobre Biodiversidad.
Este informe fue creado bajo el mandato del recordado ministro Orlando Jorge Mera, que abordaba políticas para la planificación de acciones de conservación y uso sostenible de la biodiversidad, a la vez que sirve como herramienta para la toma de decisiones en la implementación de proyectos de desarrollo, la investigación y conservación. Un texto que, en un acto de democracia participativa, se puso a disposición de la ciudadanía invitando a fortalecer las iniciativas para la conservación de la biodiversidad -ecosistemas, genes y especies-, como parte fundamental del patrimonio natural del país.
Otra acción implementada que demostró la sensibilidad de un gobierno de Abinader hacia la biodiversidad se reflejó en la decisión de República Dominicana en la 68ª Reunión de la Comisión Ballenera Internacional, con la que mostró el rechazo a la caza de ballenas para alimentación y mitigar los efectos de una posible crisis alimentaria en el mundo.
Dos proyectos más que describieron la priorización de Luis Abinader por la biodiversidad, fueron, la conservación de flamencos del Caribe, a través de la campaña “Rescate Rosado”, en alianza con diferentes instituciones, para combatir la tenencia y captura ilegal de dicha especie en los estuarios, reintegrar a la vida silvestre a los que estaban en cautiverio, educar para la protección de sus hábitats y de sus poblaciones, ubicadas normalmente en lagunas salobres, costeras y salinas de toda la isla.
Otra iniciativa fue la reintroducción de la Orquídea “Cacatica” (Tolumnia henekekii), una de las especies más raras de la República Dominicana. La reintroducción de esta planta fue la primera que se realizó en 10 años, teniendo como propósito conservar y salvaguardar esta especie endémica.
Medioambiente
En la línea medioambiental, Abinader ejecutó actuaciones tales como el aumento del presupuesto destinado para la protección del medioambiente y las aguas subterráneas, elevando la partida del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA), de US$36.677.058 (aproximadamente 2.000 millones de pesos dominicanos) a US$201,723.821 (aproximadamente 11.000 millones de pesos) para ser invertido en obras que protejan el hábitat de todos.
En la República Dominicana de Luis Abinader, además, se puso en marcha la implementación de la operación del «Interceptor 004» como parte de la plataforma «Rescate Ozama» que, solo en el 2021, recolectó aproximadamente 44 toneladas de plástico del río Ozama.
En diciembre del 2022, el país caribeño participó en la reunión del Comité Intergubernamental de Negociación (INC) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Punta del Este, Uruguay, encuentro que perseguía desarrollar un instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre la contaminación plástica, incluso en el medio marino, según el programa de medio ambiente de la ONU.
La especial vulnerabilidad de República Dominicana, como isla, a la contaminación plástica preocupaba especialmente al gobierno, de ahí la extraordinaria defensa que el gobierno de Luis Abinader hiciera que este convenio incluyera compromisos y responsabilidades de todas las partes, que sirvan de guía para las acciones nacionales y regionales, promoviendo así la creación de instrumentos de gestión eficientes, que favorezcan el desarrollo de la economía circular, los modelos de negocios responsables y la eliminación de prácticas nocivas, entre ellas la utilización de plásticos de un solo uso.
Además de todo lo anterior, en República Dominicana se celebró el Primer Foro de Carbono, donde se sentaron las bases para la búsqueda del reporte voluntario de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). También se aprobó la Ley de Residuos Sólidos, se puso en marcha una estrategia para la restauración y reforestación ecológica en cuatro áreas fundamentales: plantaciones de mangles en la ruta de huracanes en el sur, la reforestación en la zona fronteriza desde Elías Piña hasta Restauración, la plantación de árboles en áreas protegidas y la previsión del fomento de 8.900 empleos verdes para que los ríos dominicanos tengan la debida protección y sostenibilidad.
La practicas del gobierno de Abinader no se quedan ahí, sino que el Ministerio de Medioambiente y Recursos Naturales, durante el 2022 sembró en las zonas costeras del país más de 120.000 plantas con el objetivo de lograr su protección. Pero, además, recientemente, este ministerio inició la convocatoria del programa “Operación COP 2023: Juventudes Embajadoras por el Clima”, que tiene como objetivo aportar a la formación de jóvenes interesados en ser expertos o activistas en temas de cambio climático y negociaciones internacionales.
Estas son algunas de las acciones que, desde de agosto 2020 hasta abril del 2023, ha puesto en marcha el gobierno de Abinader, con la intención de que, en el corto-medio plazo, los resultados le darán a cada ciudadano mejor calidad de vida.